26 cosas que a tu camarero/mesero le gustaría decirte a la cara

Publicado 7 agosto, 2014 por admin
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– «Buenas tardes, bienvenidos al restaurante. Soy Enrique y seré su camar…»
– «Dos cañas con limón.»
– (Sonrisa) «Por supuesto. Ahora Mismo»

Nunca interrumpiríamos a nadie mientras nos habla si lo acabamos de conocer en una fiesta, sin embargo, ¿por qué hay gente que lo hace en los restaurantes?

Todos queremos llegar a un restaurante, tener una mesa lista, un rápido servicio y un camarero agradable. Los camareros también quieren un cliente majo, que no les mareé y les deje una buena propina. Sin embargo a veces la realidad es muy cruda.

Existe una relación de amor-odio entre clientes y camareros. Aquí tenéis 26 cosas que vuestro camarero se muere por decirte.

1. Tu asiento no se elige al azar.


Existen razones estratégicas para que el camarero decida tu asiento. Número de reservas, la política del restaurante y el número de comensales. No se puede sentar a dos personas en una mesa para cuatro si el restaurante esta lleno o es hora punta, hay reglas. La próxima vez que vayas a un restaurante se comprensivo, no es algo personal que te sienten cerca de la cocina en vez de en la ventana.

2. No interrumpas al camarero durante su presentación.


Tu camarero te dará la bienvenida, se presentará y te preguntará si quieres saber cuales son los especiales del día. Escúchale, es de mala educación interrumpir, en menos de 30 segundos podrás pedir tus bebidas.

3. Si tienes prisa, házselo saber a tu camarero.


En primer lugar, si tienes prisa tal vez sería mejor considerar un restaurante de comida rápida. Sin embargo, si has ido a comer a ese restaurante que te recomendaron y llevas prisa, díselo al camarero. No te enfades, no son adivinos y golpear la mesa con impaciencia no les va a hacer correr más. Habla con ellos y seguramente estarán encantados de aligerar los tiempos de espera para que puedas comer lo antes posible.

4. Avisa al camarero solo cuando estés listo.


Si el camarero regresa a la mesa y aun no estas listo, pide más tiempo, no lo hagas esperar. El tiempo de espera podrá invertirlo en otros clientes.

5. Si quieres condimentos pídelos al principio junto con la comida.


De esta forma te servirán los condimentos junto la comida y ahorraras un viaje a tu camarero.

6. Mira a tu camarero cuando te tome nota.


El contacto visual no sólo es respetuoso sino que mejorará tu servicio.

7. No mantengas conversaciones mientras te toma nota.


«¿lo quiere en su punto o poco hecho?» ¿patatas fritas o ensalada?» Tras cada pedido lo normal es que el camarero decida hacer preguntas para servirlo a tu gusto. Déjale espacio para hacerlo y espera a terminar de pedir para retomar la conversación con tu con tu pareja.

8. No están tratando de ligarse a tu chica.


El hecho de que los camareros sean educados y amables, no significa que quieran robarte a tu novia o novio. Están allí para hacer su trabajo y parte de su trabajo es ser amables.

9. No pueden leer tu mente.


Expresa a tu camarero tus alergias, intolerancias alimentarias o decepción por el servicio durante la comida para que puedan rectificarlas. Quejarse con el gerente después de pagar la factura tampoco va a mejorar tu experiencia.

10. Todo tiene un limite.


Esta bien que para cuidar tu linea quieras ensalada en vez de patatas fritas. También esta bien que personalicen tu pedido a tu gusto, pero sé sensato, todo tiene un limite. Entiende que cuando vas a un restaurante no cocinas tu y debes elegir la oferta de entre el menú.

11. No es tan fácil invitar a los amigos.


Muchos asumís que es fácil para tu camarero habitual invitarte a algo y que si no lo hace es porque es un rata. Pero la realidad es que todo se controla informáticamente, si algo falta tienen que explicarlo a su encargado o lamentablemente saldrá de su bolsillo.

12. Los camareros no cocinan tu comida.


El restaurante funciona como un equipo, pero desafortunadamente, el camarero es la cara de todos los errores e inconvenientes. El camarero solo es responsable de tomar su pedido y ponerlo en la mesa, no lo culpes de los retrasos de cocina.

13. Sé consciente de cuánto tiempo se tarda en hacer su comida.


Si pides un bistec bien hecho y un mojito debes saber que llevará más tiempo tiempo su preparación que la de una ración de patatas fritas y una cerveza.

14. No chasquear los dedos o silbar al camarero cuando quieres algo.


Sabemos que el trabajo de camarero no esta ni bien pagado ni valorado, añadir una falta de respeto no les va a hacer sentir mejor. ¿Recuerdan que los camareros se suelen presentar por su nombre? Es para que puedas utilizarlo. Sé cortés y tu camarero lo agradecerá.

15. No interrumpas a tu camarero cuando este atendiendo otra mesa.


Hacerlo, no sólo molesta al camarero sino también a los otros clientes.

16. No permita que sus hijos corran por el local.


Puedes pensar que es genial que tus hijos se diviertan y que tu puedas relajarte en el restaurante, pero lo siento, no es una guardería. Es muy dificil ocuparse de los pequeños y todo el mundo es consciente de ello. Pero desentenderse por completo de los pequeños en un restaruante molesta a los demás clientes y hace que los camareros deban esquivarlos cargando con bandejas llenas de platos calientes. Por la seguridad de tus hijos, sientalos a la mesa.

17. Tu camarero esta ocupado siempre.


Excepto en raras ocasiones es extraño encontrar a un camarero de brazos cruzados. Incluso si sois los únicos clientes del local, el camarero tiene un montón de tareas secundarias que su jefe le exigirá terminar antes de irse, limpiar los cubiertos, reponer las neveras…. No los entretengas.

18. Si el restaurante está lleno, no esperes la misma atención pero sí el mismo trato excelente.


Comprende que cuando los camareros están haciendo malabarismos con un montón de mesas al mismo tiempo, su atención debe de repartirse entre todos los clientes. Eso sí, la atención que te presten deberá ser buena. Piensa que si tuviste que esperar para una mesa, también deberás hacerlo para la comida.

19. No culpen a los camareros por los precios.


Los camareros no eligen ni la cantidad de comida y ni bebidas, ni mucho menos de lo que cuestan. Una vez que hayas consumido tu comida eres responsable de pagar por ello, no importa tu nivel de satisfacción.

20. Lo extra cuesta.


Si pides un vino mejor, más salsa, doble de queso… no te enfades con el camarero cuando traiga la cuenta.

21. Si piensas dividir la cuenta, pídelo antes de que emita el ticket.


Las cuentas en los restaurante se hacen por mesa y no por persona. Si sois varios amigos y no lleváis cambio separar la cuenta, coméntalo al camarero antes de que haga la cuenta. Es mucho más fácil para el camarero dividir la cuenta antes de emitir el ticket que después de llevarlo a la mesa.

22. Aunque las propinas no son obligatorias piensa en si te han dado un buen servicio.


Por norma general los camareros españoles no esperan grandes propinas pero no dejar ni un mísero euro es señal de haber dado un servicio nefasto. Los sueldos no son altos, y las propinas, además de reconocer el trabajo, ayudan a llegar a final de mes.

23. Probablemente este trabajo no es el trabajo de sus sueños.


Cuando eran pequeños no soñaban con atender mesas hasta la madrugada, no soñaban con trabajar más cuanto más se divierten los demás. Aun así es un trabajo igual de importante que tu trabajo. Son humanos y también tienen malos días. Si bien es cierto que encontrar un buen camarero se agradece, muchos de los puestos de camarero son temporales. Tenlo en cuenta y ponte en su lugar.

24. Cuanto más tiempo permanezcas en una mesa más haces trabajar al camarero.


Es cierto que tienes todo el derecho a tomarte tu tiempo y disfrutar de la comida, pero no acampes en el restaurante, tu mesa pueden necesitarla futuros clientes. Además, piensa que el trabajo del camarero terminará cuando recoja el restaurante, incluida tu mesa, por ello, si la comida se alarga de la hora del cierre, por cortesía, deja una buena propina.

25. La gente tiene vida.


Por si no lo sabes, los camareros tienen divertidos horarios de trabajo. Sus jefes los diseñan con imaginativas jornadas que dicen: «de 20.00h a CIERRE». El CIERRE es un concepto divertidísimo que significa que la hora de irte a casa está condicionada a que todo el mundo se vaya para recoger, limpiar y preparar todo para el día siguiente. ES EL TRABAJO DESPUÉS DEL TRABAJO.

Por ello no te presentes en un restaurante a 10 minutos del cierre de la cocina o al final de la noche. Si sois los últimos del restaurante, no hagas como si el tiempo se hubiera detenido para contemplar lo ojos de tu novia o novio. Los camareros tienen vida, termina y vete a tomar una copa a un pub.

26. ¡Sorpresa! Las redes sociales también están para hablar bien de los restaurantes.


Las opiniones de los clientes son importantes, lamentablemente la mayoría solo relatan sus malas experiencias. Por ello, si has tenido un buen servicio, recomiéndalo. Si en parte ha sido gracias al camarero nómbralo. Los gerentes están muy atentos a estas opiniones y puede que gracias a ese comentario tu camarero sea recompensado.

Basado en un artículo de Elite Daily

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