¿Saquearías una ciudad radiactiva? Jugándose la vida en Chernobil

Publicado 13 febrero, 2015 por Alberto Díaz - Pinto
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Junto al reciente caso de la central nuclear de Fukushima en 2011, Chernóbil es otros de los lugares donde se han producido uno de los accidentes nucleares más grandes de la historia. El accidente de Chernóbil sucedió en la central nuclear Vladímir Ilich Lenin -a 18 km de la ciudad de Chernóbil, actual Ucrania- el sábado 26 de abril de 1986 y, aún hoy, es considerado el más grave en la Escala Internacional de Accidentes Nucleares, constituyendo también uno de los mayores desastres medioambientales de la historia.

Aunque la zona se evacuó por peligro radiactivo, los saqueadores aprovecharon las circunstancias. Maxim, blogger y asiduo visitante de la zona de exclusión de Chernóbil, comenta que los saqueadores han estado siempre ahí. «La primera ola de saqueos se produjo justo después de la explosión, en la que aprovecharon para robar de todo: aparatos electrodomésticos, alfombras, joyas, dinero y todas las cosas que las personas abandonaron con la evacuación de urgencia«.

Veamos cuál es el estado actual de la ciudad de Chernóbil tras los saqueos y la hecatombe nuclear:

La segunda ola de saqueadores comenzó en los barrios de Chernóbil en el año 2000. Así es como quedó el supermercado más grande de la ciudad

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Esta es una sucursal bancaria. En el interior podemos ver las dos cajas fuertes, obviamente abiertas…

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Desvalijaron prácticamente todos los metales que se podían vender, como el cobre, aluminio y el acero

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Esto es un almacén, al que las autoridades llevaron muchos aparatos de apartamentos privados de toda la ciudad. Fueron protegidos hasta finales de 1990

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En los edificios de apartamentos todos los buzones permanecen abiertos

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Todos los equipos eléctricos que encontraron los saqueadores fueron robados

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Muchos techos de los edificios fueron quemados. Así los saqueadores conseguían derretir el plástico que protegía el cobre de las instalaciones

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Estanterías, sillas y demás muebles permanecen en los rellanos de las viviendas. Posiblemente porque eran demasiado pesados para transportalos

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En este lugar se puede ver cómo se llevaron un par de metros de azulejos de cerámica

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Todo el equipo de los ascensores de las viviendas más o menos permanece intacto, debido a la gran dificultad que supone sacar todo el material

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Sin embargo, sí que metieron sus manos en los motores del ascensor, todos rotos por búsqueda de cobre

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«En la mayoría de los apartamentos se realizaron búsquedas intensivas de objetos de valor, primero por los soldados de la región, y después por merodeadores», según afirma el blogger

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Casi todas las viviendas presentan este desolado aspecto

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Sin embargo, algunas casas todavía mantienen, sorprendentemente intactas, sus antenas de televisión

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Un interruptor robado y otro intacto a su lado, ¿por qué robar un interruptor? o ¿por qué no robar los dos?

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Maxim afirma que por todos lados hay cosas que los saqueadores pensaban llevarse, pero que tuvieron que dejar abandonadas

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Cerca del centro científico pueden verse todavía armazones metálicos que alguna vez formaron parte de aparatos electrónicos soviéticos

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En su interior hay decenas de piezas de aparatos desmontados. Los saqueadores iban buscando elementos que contuviesen oro y otros metales preciosos

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Las autoridades trataron de frenar estos saqueos cuando se encontraron unos televisores radiactivos en las tiendas de electrodomésticos de Kiev

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El principal problema no es el saqueo, ni si se trata de un hecho lícito o no, sino más bien que las cosas que se robaron eran potencialmente radiactivas y que seguramente gran parte de esos objetos acabaron circulando por todo el país y en parte de Rusia

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Fuente: englishrussia, La Voz del Muro, fronterasblog

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