Todo el mundo sabe que el ejercicio es bueno para el cuerpo, para la mente y el alma, sin embargo muchas personas no encuentran tiempo para ir al gimnasio o practicar un poco de ejercicio diario.
Es cierto que vencer la pereza no es fácil y las agujetas de las primeras semanas hacen que muchos tiren la toalla, pero todo esfuerzo tiene su recompensa.
No importa la edad o condición física, siempre es un buen momento para comenzar a practicar deporte, reducir nuestros achaques, decir adiós a las preocupaciones y mejorar nuestro día a día.
Descubre 14 extraordinarios beneficios sobre el ejercicio físico que te ayudarán a practicar deporte y llevar un estilo de vida saludable.
1. Reduce el estrés.
Si el ritmo de vida de la ciudad va a acabar contigo, libera tu frustración practicando algún deporte, tras el entrenamiento te sentirás muy relajado.
2. Aumenta la confianza.
El ejercicio no deja de ser una competición saludable con uno mismo, y superarse siempre trae un sentimiento de orgullo y empoderamiento. Además tu piel se verá más limpia, tu cuerpo tonificado e irradiarás energía -físicamente hablando, no confundir con magufadas-, lo que te hará sentirte más seguro de ti mismo.
3. Tu capacidad cerebral aumenta.
El cuerpo y la mente son uno y trabajan unidos, coordinar nuestros músculos y ejercitar movimientos también supone un entrenamiento cerebral. Además durante el ejercicio el cerebro recibe más oxigeno y nutrientes, por lo que tras una jornada de deporte nuestra mente trabaja con mayor claridad.
4. Liberate de las preocupaciones.
Ya que practicar deporte nos ayuda a pensar con claridad y disipar el estrés, no es de extrañar que las personas deportistas no tengan demasiadas cosas en la cabeza, pues el ejercicio ayuda a encontrar soluciones a los problemas y a lidiar con las preocupaciones.
5. Ayuda a conciliar el sueño.
Ir al gimnasio con frecuencia permite que nuestros ciclos de sueño se regulen con precisión. El cuerpo te dirá cuando debes dormir y también despertar, sin necesidad de alarmas.
6. Serás más disciplinado.
Vencer la pereza y cumplir con un entrenamiento deportivo nos hace sentir personas disciplinadas, capaces de asumir nuevas conductas y retos.
7. Te hará sentir feliz.
El ejercicio libera endorfinas, una hormona que te hará sentir feliz y positivo.
8. Te ayudará a tener una postura correcta y menos molestias cervicales.
El ejercicio diario fortalecerá tus músculos aumentando tu equilibrio y facilitará el mantenimiento de una buena postura. El cuello, los hombros y la espalda, sufriran menos si refuerzas tu zona abdominal y realizas estiramientos que aumenten tu elasticidad.
9. Tus reflejos aumentarán.
No sólo pensarás con mayor claridad, sino que se ha demostrado que una sesión de ejercicio incrementa tu agudeza mental manteniendo tu nivel de alerta y aumentando tus reflejos de 4 a 10 horas después.
10. Te carga las pilas.
El ejercicio físico te carga de energía, por lo que es ideal para afrontar una dura jornada de trabajo, es por eso que miles de personas practican deporte a primera hora del día.
11. Aumenta tu productividad y te hace más eficiente en el trabajo.
Menos estrés, más energía, más disciplina y mayor agudeza mental = Mayor productividad.
12. Alarga la vida.
Tu cuerpo es una máquina que se oxida con cada minuto que permanezcas sentado, mantener una vida activa engrasa la maquinaria para seguir funcionando correctamente durante más tiempo.
13. Aleja las enfermedades.
Los estudios han demostrado que las personas que practican ejercicio regular son menos propensos a enfermar o enfriarse. Del mismo modo mantienen las enfermedades y achaques típicos de la edad, lejos por más tiempo.
14. Mejora tu imagen y reafirma tu autoestima.
Puede ser la menos o la más importante según se mire, lo cierto es que el ejercicio mejora el amor que sentimos por nosotros mismos y la imagen que proyectamos a los demás.
Fuente: wittyfeed.com
Para saber un poco más de historia del deporte:
100 Años de fitness muestra la manera en la que ha cambiado la manera en la que nos ponemos en forma.
La siguiente historia en vídeo, reúne en tan solo 100 segundos, desde los suaves estiramientos de la década de 1910 y 1920, diseñados para reducir la transpiración «poco femenina», el uso del hula-hoop en mitad del siglo XX hasta los entrenamientos de Zumba de alta intensidad de hoy en día.
Se inicia con la década de 1910, una época en que las mujeres vestían camisones hasta los tobillos y donde una de las máximas del deporte, lo creas o no, era hacer movimientos pélvicos para facilitar los movimientos intestinales y reducir el estreñimiento.
El deporte ha ido evolucionando sin que nos demos cuenta, y es curioso encontrar cuál fue tu época en el vídeo. A veces nos reímos de las personas de generaciones anteriores al practicar ciertos movimientos y bailes por encontrarse desfasados, pero pronto seremos nosotros de los que se rían…
Original: Bebenden UK
