El sexo, aunque haya a quienes no le guste reconocerlo, es una de las cosas que unen y desunen relaciones a diario. Por tanto, me atrevería a decir que es un aspecto no fundamental, pero sí a tener muy en cuenta en el buen funcionamiento de una relación. Pero ¿por qué transcurrido un tiempo, todos suelen experimentar un declive en este terreno?
En un estudio científico de 2016, los investigadores alemanes Schmiedeberg y Schröder quisieron conocer si la satisfacción sexual disminuye a medida que la relación se va haciendo más larga y encontraron que sí, que efectivamente va decayendo, pero este deterioro no es igual en todos los casos y no es irreversible.
Para ello, examinaron las vidas sexuales de 2814 personas heterosexuales en sus respectivas relaciones. Los expertos encontraron que «el punto más dulce», sexualmente hablando, tiene lugar entre los 6 primeros meses y el año.
«Encontramos un desarrollo significativo y positivo en el primer año de relación, seguido de una disminución estable. Los participantes informaron de una mayor satisfacción en su vida sexual en la segunda mitad del primer año que en los 6 primeros meses. Sin embargo, también percibieron que después del primer año la satisfacción sexual disminuía constantemente con el tiempo.»
Es precisamente en este tiempo cuando ambos miembros de la pareja informaban de su satisfacción sexual, pues aún siguen descubriéndose pasiones ocultas del otro. Así pues, el estudio también sugirió que «la satisfacción inicial en una relación podría deberse a un proceso de aprendizaje«.
El equipo de investigación cree que durante ese primer año las parejas están aprendiendo sobre las habilidades sexuales del otro y explorando hasta dónde alcanzan. Lo nuevo nos resulta atrayente, y esto es especialmente cierto cuando se trata de nuestra sexualidad.
La psicóloga Megan Fleming sugiere que el límite del extremo de este «punto dulce» se encuentra en los 18 meses. También narró que existen dos explicaciones posibles sobre por qué se produce este declive:
«Por un lado, los cambios en el deseo sexual podrían conducir a un desajuste entre el hombre y la mujer, ya que los patrones divergentes del deseo sexual masculino y femenino durante el curso de una relación están bien documentados en la literatura. Por otro lado, como la satisfacción sexual está vinculada a la pasión, su desarrollo puede seguir el patrón delineado por la pasión… es decir, un comienzo intenso puede derivar en una disminución significativa para ambos sexos».
Tras este período de exploración de las habilidades sexuales del otro, la mayoría de las parejas parece estancarse en una especie de rutina sexual. Los investigadores sugieren que nuestra pasión por el otro simplemente disminuye con el crecimiento de la relación.
Sin embargo, de acuerdo con los científicos, existen otros factores adicionales que pudieran jugar un rol en todo esto: la salud, la comunicación y el afrontamiento de conflictos. Las personas con buena salud, mayor comunicación y mejores modelos de resolución de conflictos generalmente reportaron más satisfacción sexual que aquellos que mostraron un peor estado de salud, falta de comunicación y mayores conflictos.
Si bien esto no significa que la satisfacción sexual vaya a disminuir en tu relación, sí que revela una tendencia bastante común en la mayoría de las parejas, que no está de más conocer para encontrar formas de romper con ciertas rutinas, conectar de otro modo y renovar la relación con cosas nuevas.
