El próximo 31 de agosto de 2019 se cumplirán 22 años desde la muerte de Diana, antigua princesa de Gales, quien falleció en un terrible accidente de coche en París.
Sin embargo, este artículo no hablará de las extrañas circunstancias que rodearon su muerte o diversas teorías de la conspiración. Aquí solo queremos dar testimonio de un pequeño detalle que ha pasado desapercibido todos estos años y que muestra el estricto protocolo al que la princesa era sometida.
Estas son algunas de las primeras fotografías que la pareja hizo públicas en las revistas del corazón
Y esta, la fotografía oficial de su enlace
En todas ellas puede verse como el príncipe Carlos cobija y «protege» a Diana
Mientras ella se suela acurrucar en su hombro o su pecho…
Sin embargo, este gesto no era para nada natural y formaba parte del protocolo de la casa real
Un recurso que dejaba claro la superioridad de la corona
sobre el origen aristocrático de Diana
Y es que la realidad era que Diana era un par de centímetros más alta que Carlos
pero se le obligaba a agacharse y aparecer un palmo o dos por debajo de Carlos
Al menos durante los primeros años, desde 1981 a 1984, momento en el que nace su primer hijo y el matrimonio comienza a desmoronarse
Después de lo cual, Diana decide rebelarse y liberarse de las absurdas y arcaicas normas protocolarias que le eran impuestas
Definitivamente, Diana no era la mujer sumisa que la familia real inglesa quería que fuera. Tras un tumultuoso matrimonio del que la princesa decía «ser tres personas», la pareja se separó en 1992 y firmó su divorcio en 1996. Murió al año siguiente cuando empezaba de nuevo a sonreír, tenía 36 años de edad y toda la vida por delante. Siempre la recordaremos.