¿Cuántas monedas hemos gastado tratando de conseguir alguno de sus premios? ¿Cuántas veces vimos bajar su garra pensando que ganaríamos? Y sobretodo, ¿cuántas veces hemos ganado realmente?
Las máquinas de grúa o máquinas de garra como se las conoce en algunos países de Latinoamérica son un entretenimiento recreativo que puede encontrarse en miles de ferias, gasolineras y parques de atracciones de todo el mundo.
Diseñadas con colores chillones y llenas de regalos atractivos, esperan colocadas estratégicamente en lugares clave con la intención de que inocentes niños y adultos gasten sus ahorros persiguiendo sus premios.
Pero como muchos ya sospechan, estas emblemáticas máquinas esconden un secreto, y es que dependen más de la suerte que de nuestra habilidad con los mandos. No te lo pierdas.
Un negocio rentable.
La banca nunca pierde dice un refrán, y el feriante de máquinas de grúa lo cumple a rajatabla. Resulta que estas máquinas están completamente trucadas y sólo dan un premio cuando financieramente resulta rentable. Es decir, sólo permiten ganar si hay beneficio.
Esto lo consiguen manipulando la fuerza de la garra mecánica con la que debemos atrapar los objetos deseados. En función de las monedas que van entrando en el aparato, la máquina realiza una serie de cálculos y decide si ha cubierto el montante del objeto más caro que tiene en su interior, si la respuesta es sí aplica una mayor fuerza a su brazo.
Del mismo modo el aparato puede programarse para aplicar mayor fuerza cada 21 intentos o de forma totalmente aleatoria, pero siempre después de haber cubierto las perdidas.
¿Cómo es capaz está engañosa máquina de hacer su truco? Puedes verlo con tus propios ojos en el siguiente video.
¿Máquina de habilidad o máquina de azar?
Piense en un niño de 10 años gastando su dinero alegremente en una máquina tragaperras, una ruleta o al blacjack. Escandaloso ¿verdad? Entonces ¿por qué no nos llama la atención dejar que los menores gasten el dinero en estas máquinas?
Siempre hemos pensado que las máquinas de grúa dependían de la habilidad de la persona a los mandos. Que eran un juego recreativo con premio asociado como podrían ser las escopetas de la feria, los dardos o lanzar bolas en peceras. Juegos difíciles pero que dependen de la pericia del jugador.
Pero si la máquina de grua sólo entrega su premio cuando es rentable y esta mecánicamente programada para entregarlos aleatoriamente, no depende del la habilidad del jugador sino del azar.
Las máquinas tragaperras así como otros juegos de azar solo pueden ser utilizados por mayores de 18 años, con autonomía y conciencia para saber que están tentando a la diosa fortuna.
Las máquinas de grua están especialmente diseñadas para atraer la atención de los niños, muchos de ellos incapaces de decidir si el juego está amañado.
Tal vez deberíamos de empezar a divulgar esta información, ya que una máquina de grúa bien ubicada puede llegar a ganar hasta 25.000$ al año gracias a nuestra inocencia.
Fuente: HelloU vía Circoviral
