Después de conocer el origen de expresiones tales como «no vino ni el Tato» o «me importa un pito», hemos querido explicaros de dónde viene «estar en la gloria», pues además de sentir curiosidad por el origen de nuestra lengua, es una expresión de uso popular y muy extendida.
Seguro que en alguna ocasión la habréis usado para dejar claro que os encontráis a gusto con algo, con alguien o con una determinada situación. No obstante su origen es bien distinto. Tanto que nunca lo habríamos imaginado, de no ser por la revista Low-Tech Magazine, donde lo explican con todo lujo de detalles.
Por lo visto, la «gloria« de la expresión se refiere a un sistema de calefacción utilizado desde la Edad Media en Castilla que proviene del hipocausto romano, y que aún hoy se sigue utilizando en algunas casas situadas en zonas rurales.
Se trataba de una una especie de caldera que solía instalarse en el exterior de la vivienda y cuyo tiro de la chimenea no era vertical, sino que pasaba horizontalmente por debajo del suelo de las estancias a calentar, haciendo que la superficie estuviese caliente. Una vez que atravesaba toda la estancia, el humo salía de forma convencional, es decir, en vertical.
Cuando llegaba el frío invierno, la gloria era encendida para calentar las estancias y esto era algo realmente complaciente, por lo que estar en una de estas estancias dio lugar a la expresión «estar en la gloria».