Aunque tengamos la más avanzada tecnología de localización por satélites, las armas más avanzadas, ordenadores capaces de procesar trillones de instrucciones por segundo, gafas de realidad aumentada, virtual e incluso nocturna, etc. hay algo terriblemente efectivo contra toda tecnología en seguridad: nuestra propia ingenuidad. Y es que si confiamos en una persona todo lo demás no sirve para nada.
No es la primera vez que algún desconocido se hace pasar por alguien, burlando todos los controles. Pero Mark David quiso dar una vuelta de tuerca a todo lo que habíamos visto, y disfrutó de una noche de ensueño acompañado por su falso Oscar. Solo necesitó un esmoquin y la réplica de la estatuilla para conseguir comer y beber gratis, además de entrar a sitios exclusivos sin que le hicieran ninguna pregunta. ¿No sospechó la seguridad? Para qué:
«te dejo pasar pero tienes que dejar que me haga una foto contigo y con tu Óscar
Si eres el ganador de un premio de tal importancia, pasarás una noche inolvidable, pero si no lo eres, también lo pasarás bien. ¿Funcionará igual con un Goya?
Original: New Media Rockstars
