10 ciudades que fueron planificadas para ser contempladas a vista de pájaro

Publicado 13 junio, 2017 por Alberto Díaz - Pinto
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La mayoría de las ciudades planificadas no fueron levantadas pensando en cómo se verían desde el cielo, pero lo cierto es que algunas de ellas forman patrones increíbles.

Estas ciudades fueron diseñadas con un propósito claro: optimizar el tráfico, maximizar el acceso a los espacios verdes y, por supuesto, mantener todos sus elementos urbanísticos perfectamente ordenados. Muchas nacieron de la lucha entre dos grandes ciudades que compitieron por ser la capital de sus respectivos países, mientras que otras lo hicieron con miras a que los trabajadores tuvieran un acceso cercano y rápido a sus puestos en la periferia. Otras, sin embargo, ostentaron la intención de convertirse en una utopía urbanística.

Es más, Google lanzó hace algunas semanas una nueva versión de Google Earth en la que podemos apreciar, con una calidad excelente, todas estas maravillas arquitectónicas. Estas son algunas de las más impresionantes:

La Plata, Argentina

Conocida popularmente como «ciudad de las diagonales», La Plata fue planificada y edificada específicamente para convertirse en la capital de la provincia de Buenos Aires, después de que la Ciudad de Buenos Aires fuera declarada capital federal de Argentina en 1880. 

Un dato curioso es que la urbe recibió varios galardones durante la Feria Mundial de 1889 de París, como mejor “Ciudad del Futuro” y “Mejor realización construida”. 

Actualmente tiene una población de 740.000 habitantes.

Washington D.C, Estados Unidos

Una ciudad que fue planificada cuando George Washington decidió que sería la capital de EE.UU. en 1771, aunque el gobierno no se mudaría hasta el 1800. 

El arquitecto encargado de llevar el proyecto a cabo fue francés Pierre Charles L’Enfant, quien centró la ciudad en la colina Jenkins para colocar el Capitolio y las avenidas principales que parten de él formando, a su vez, figuras poligonales con otras calles. Más tarde fue Andrew Ellicot quien asumió el control de proyecto y efectuó algunos cambios.

Actualmente la ciudad de Washington tiene una población de 672.000 habitantes.

Brøndby Haveby, Dinamarca 

Este curioso municipio residencial se encuentra ubicado a las afueras de Copenhague y fue planificada como una zona tranquila en la que llevar una vida tranquila alejada de la bulliciosa ciudad en 1964. El concepto proviene de las antiguas poblaciones rurales, donde los habitantes se reunían en un plaza central para intercambiar noticias y realizar actividades de ocio.

Dos docenas de «tartas», cada una dividida en 12 secciones. En cada porción una vivienda cuyos terrenos van a parar al centro del complejo.

Manhattan, Nueva York, Estados Unidos

Aunque no se trata de una ciudad como tal, no podíamos dejarnos la isla de Manhattan en el tintero. En un principio, su diseño de cuadrícula, proveniente del Plan de los Comisarios de 1811, fue muy criticado por su excesiva ortogonalidad. Central Park, en el centro de macroproyecto urbanístico, no fue incluido hasta 1853.

Manhattan cuenta con una planificación urbanística brillante, si se entiende cómo funcionan las calles y avenidas. Las primeras discurren de este a oeste y las segundas de norte a sur. Ahora seguro que entenderéis por qué en las películas, cuando alguien se sube en un taxi le dice al conductor: a la 35 con la 5ta avenida.

El Salvador, Chile

Brasilia, Brasil

La capital de Brasil es una de las mejores ciudades planificadas del mundo, que fue levantada en apenas 41 meses. Fundada en abril de 1960, Brasilia fue pensada para sustituir a Río de Janeiro como capital, y diseñada por el arquitecto Lúcio Costa, quien le dio su forma de pájaro o avión tan característica.

Se trata de una de las ciudades más grandes del mundo construidas en el s. XX, en la que viven cerca de 4 millones de personas. 

Sun City, Arizona, Estados Unidos

Aunque solo es un área metropolitana de la ciudad de Phoenix, lo cierto es que en Sun City viven más de 37 personas. Fue una zona pensada como residencial para jubilados, cuyas calles forman círculos concéntricos la mar de hipnóticos.

Cuando fue inaugurada, el 1 de enero de 1960, 100.000 personas se compraron una vivienda allí durante la primera semana. En el centro existe un centro comercial, zonas recreativas y 8 campos de golf.

Palmanova, Italia

Esta fortaleza de nueve puntas es quizás el mejor ejemplo de una ciudad planificada del Renacimiento. Palmanova fue construida en 1593 y está ubicada en el noreste de Italia, cerca de la frontera con Eslovenia.

Fue diseñada para ser el hogar de una comunidad totalmente autosuficiente, y como ciudad defensiva contra los otomanos. Tenía tres entradas vigiladas, las murallas entre cada uno de los puntos en forma de estrella y, finalmente, un foso. Lamentablemente, nadie estaba dispuesto a vivir allí, así que con el tiempo fue utilizada para dar cobijo a los criminales indultados gratuitamente. 

Actualmente y desde 1960 Palmanova es un monumento nacional, el hogar de 5400 personas y un destino turístico muy concurrido. 

Camberra, Australia

A finales del siglo XIX, cuando las dos ciudades más grandes de Australia, Sydney y Melbourne, competían por ver cuál debía ser la capital del país, Canberra (a mitad de camino entre estas dos) fue escogida como el lugar ideal para construir una nueva capital en 1908.

Se convocó un concurso para decidir quién sería el diseñador de la nueva Canberra, ganando el de los arquitectos americanos Walter y Marion Griffin en 1912.

Barcelona, España

Instagram / Ian Harper

Barcelona no es exactamente una ciudad planificada, pero desde luego su Ensanche es uno de los ejemplos más impresionantes de planificación urbana. Además de ser el distrito más poblado de España, con 269.185 habitantes, destaca por su patrón de cuadrícula y sus diagonales, aunque sus manzanas no forman un cuadrado perfecto sino un octógono de esquinas cortadas en caflán. 

El famoso Ensanche fue diseñado por Ildefonso Cerdá en la década de 1850 y, aunque el plan no gustó nunca a la burguesía de la época por ser visto como un despilfarro, en 1860 fue aprobado por el gobierno central de Madrid a través de un decreto ley. 

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