Tener un bebé no es una tarea nada fácil, al contrario es una de las cosas más complicadas y demandantes. Sin embargo, aquellos que deciden formar una familia, dicen que no lo cambian por nada. La sonrisa en sus rostros cuando sus bebés dan sus primeros pasos o dicen su primera palabra, o el ansiado momento cuando el «mamá o papá» sale de sus bocas», son ejemplos de lo entrañable que puede ser tener un bebé.
Sin embargo, no todo es como parece y en lugar de romantizar la paternidad, algunos padres son muy honestos al respecto y comparten sus aventuras o más bien desventuras educando y criando a sus hijos. Por lo menos, la etapa de la infancia es una de las más complicadas si de travesuras hablamos.
Los siguientes ejemplos muestran varios casos de niños un poco traviesos que con sus ocurrencias pusieron a prueba el nivel de paciencia que sus padres tienen con ellos.
1. «Uno de mis hijos mordió el queso en tres lugares diferentes»
2. «Mi princesa me ayudó a prepararme para el trabajo»
3. «El perro fue víctima del gran sentido de la moda de mi sobrina».
4. «Mi hija come mantequilla cada que cocino pero ahora se confundió con una barra de jabón».
5. «Dime que tienes hijos, sin decirme que tienes hijos»
6. Alguien puso su silla afuera y unos pequeños artistas pasaron por ahí.
7. «El control de la televisión sufrió algunos problemas»
8. «Su amor por su bebé es tan grande que hace su manzana en forma de papas fritas».
9. «Estaba tan cansada que ni sintió al niño sentarse encima de ella en medio de su siesta».
10. «El escondite es el juego favorito de mi hija y es una experta».
11. El niño quiso dejar su huella en el avión.
12. «Mis dos hijos son muy inteligentes. Uno está jugando un iPad y el otro tiene un gusto extraño por los controles».
13. «Mi hija vino corriendo y dijo que nuestro inodoro estaba fumando. Me sorprendí al ver de lo que se trataba».
14. «El escondite perfecto para guardar tu comida no son los zapatos»
15. «Los niños quisieron darle un toque diferente al Ipad».
16. «Mi sobrina estaba de visita y dejó su corazón en el arenero del gato»
