De vez en cuando, uno decide comer fuera de casa con la esperanza de tener una experiencia inolvidable con la comida. Es decir, queremos que los platillos sean una delicia y no solo eso sino que también tengan una presentación aceptable pues muchas veces el amor nace de la vista. Y si nuestro alimento no se mira tan bonito, nos hará dudar de su sabor.
Así que la presentación es sumamente importante y muchos restaurantes lo saben. Es por eso que intentan destacar en el mundo de la gastronomía a como dé lugar, creando platillos extravagantes con presentaciones controversiales. Sin embargo, muchos de estos lugares de comida parecen no conocer los límites y de pronto, los platos no son lo suficientemente buenos para soportar la comida.
Entonces, poco a poco los platos están siendo reemplazados por piedras, macetas, sacos de tela, y hasta herramientas de albañilería. ¿Por qué? No lo sabemos aún pero si un día vas a un restaurante puede que te encuentres con unas papas fritas servidas en una pala.
A continuación te queremos mostrar algunas de las tantas presentaciones de comida que pueden caer en lo absurdo. Lo más probable es que te dejen con muchas dudas y ninguna respuesta, lo que te hará reflexionar sobre el sentido de la vida. Al final, podrás amarlas u odiarlas, no hay punto medio.
1. Parece una planta real pero es un postre de bayas y vainilla con migas de chocolate
2. Estas papas navegarán directo a tu mesa
3. Costillas en un frasco sobre una tabla de picar y unas tenazas para sacar la comida
4. No sé qué es más raro, que estos quesos parezcan de juguete o que estén servidos sobre una botella vacía coleccionable
5. Este restaurante tiene una temática de autos y sirve los aros de cebolla en embudos para gasolina
6. Papas frescas, del campo a tu mesa
7. Croquetas de pollo sobre un almohadón de plástico que pesaba más de dos kilos
8. Todos conocemos al burrito sabanero pero pocos sabían del burrito jamonero
9. Estamos de acuerdo en que las sartenes son para poner comida pero ¿cuál era la necesidad?
Además tiene una cuchara de metal ¡El teflón se va a dañar!