17 pruebas de que el tiempo no perdona y acaba con todo
Estamos seguros que más de uno de nuestros lectores ha guardado algo desde que eran niños, ya sea un juguete, una prenda de vestir, o hasta un mero cojín, pero también sabemos que esos objetos definitivamente no se ven como el primer día que los tuviste. A lo mejor ese objeto ya no luce como nuevo, pero le guardaste cariño.
En otras ocasiones, existen ese tipo de personas que tienen una cosa y no la dejan de usar hasta que se rompe. Por ejemplo zapatos, camisas, contenedores o hasta un libro. El caso es que en estos objetos se ve la marca del uso que les has dado y como el tiempo las ha afectado.
Hoy te traemos 17 imágenes que demuestran que el uso continuo de las cosas las termina deteriorando.
1-. Una tabla para papeles que ya necesita ser jubilada.