Tal vez aún no hayas escuchado sobre la pareidolia, pero seguramente sí has visto rostros en objetos comunes e inesperados. Si es así, entonces ya has experimentado la pareidolia.
Ver caras en lugares donde no las hay es algo más común de lo que crees y no significa que te estas volviendo loco. Simplemente se debe a un fenómeno psicológico llamado pareidolia, que consiste en la percepción errónea de formas conocidas y significativas gracias a un estímulo vago y aleatorio.
Dicho con otras palabras, un ligero estímulo visual, como tres círculos ordenados de cierta manera, pueden hacernos ver un rostro sorprendido en una pared, por ejemplo. E inmediatamente pensamos que la pared vio algo asombroso que la hizo poner esa expresión. La forma más común de pareidolia es la visualización de rostros; pero también se pueden ver muchas otras formas, como animales.
Este fenómeno puede ser bastante divertido y sin duda nos encanta encontrar caras amistosas en espacios inusuales. A menos, por supuesto, que estés solo… En un cuarto oscuro… A mitad de la noche… Entonces lo último que quieres ver es una cara sonriéndote.
A continuación te queremos mostrar algunos curiosos ejemplos de lo que es la pareidolia. Echa un vistazo.
No se ve contento
La sombra intenta decirnos algo
Un lindo perrito
Jesucristo te observa
No te metas con la planta
Ten cuidado con el jalapeño malvado
Contemplen a la manahoria
Tranquilo, no es una reunión del KKK, tan solo son sombrillas cerradas en la playa
La mantequilla de maní está molesta
Un patito que tiene la cara de un husky en su pico
Cuando descubres que tú eres la cena
Aquí hay dos elefantes
¿Puedes ver ambos?
La cerveza está feliz de verte
Me pareció ver un lindo gatito
«¡No puede ser!»
Una sombra muy sugestiva
La prueba de que todos los perros van al cielo
Parece una adorno inocente, pero ten cuidado
Esta roca se ve igual de confundida que nosotros
Sin comentarios
Sabemos que tú también lo viste






























