Saber ahorrar es una virtud muy poco valorada. Todos pensamos que si eliminamos algunos gastos superficiales podríamos ahorrar, pero la cosa no es tan sencilla.
Para poder ahorrar en condiciones hay que tener un plan. No tiene por que ser complicado y el que os vamos a proponer nosotros tan solo cuenta con 2 reglas básicas. Si las seguimos a rajatabla, a final de año nos encontraremos con una cantidad de dinero inesperada que puede sernos muy útil
A continuación os vamos a explicar las reglas y como seguirlas:
Regla nº 1
Esta regla puede dar lugar a confusión, pero una vez que os la explique veréis como todo cobra sentido. Se trata de que todas las noches la última cifra tanto el dinero en metálico como el que hay en tu cuenta corriente lo redondees a la baja hasta el 0 más próximo.
Ese dinero restante lo puedes guardar en una hucha o en una cuenta de ahorros. En la siguiente imagen vemos la explicación.
De este modo todos los días ahorrarás aunque solo sea una pequeña cantidad. Si crees que tu economía te lo permite, puedes elevar a 2 el número de ceros que debes dejar.
Cumpliendo esta regla además de ahorrar dinero todos los días sabremos exactamente de cuanto disponemos para nuestros gastos.
Regla nº 2
Cuando llegue final de mes y cobres del sueldo, todo el dinero restante del mes anterior debe ir a parar a tu cuenta de ahorro. Es una manera de empezar desde 0 cada mes y además propicia que no subestimemos nuestra economía con ese «dinero sobrante».
Si sigues estas 2 sencillas reglas obtendrás muchos beneficios con poco esfuerzo. Tendremos más claras nuestras cuentas, ahorraremos algo de dinero casi sin darnos cuenta y dispondremos de una pequeña reserva para posibles eventualidades.
