A medida que la pandemia de coronavirus continúa propagándose por todo el mundo, es de suma importancia seguir tomando las precauciones sanitarias pertinentes. Por eso, en nuestro día a día ya no faltan las mascarillas, los desinfectantes de manos y otros productos para prevenir la propagación del virus.
Sin embargo, constantemente se nos recuerda que no todos los productos del mercado son igualmente efectivos.
Un error común es pensar que cuanto mayor sea el porcentaje de alcohol que usa para desinfectar, mayor será el poder desinfectante del producto. No obstante, sorprendentemente, los números no siempre cuadran.
¿Qué es el alcohol isopropílico y cómo se usa?
El alcohol isopropílico (2-propanol), también conocido como isopropanol o IPA, es el desinfectante más común y ampliamente utilizado en la industria farmacéutica, hospitales, salas blancas y en la fabricación de dispositivos electrónicos o médicos.
El alcohol isopropílico al 99% es isopropanol puro, mientras que el alcohol isopropílico al 70% es isopropanol puro diluido con 30% de agua purificada. Ambos matan a virus y bacterias, al desnaturalizar sus proteínas. Sin embargo, una solución de alcohol isopropílico al 70% disuelve sus lípidos, resultando muy eficaz contra la mayoría de las bacterias, hongos y muchos virus.
Por qué el IPA al 70% es un mejor desinfectante
En términos de desinfección, las concentraciones más altas de alcohol son menos efectivas a la hora de matar bacterias. Estas, se eliminan mejor con el uso de un isopropanol menos concentrado, ya que las concentraciones más altas provocan una lesión externa que forma una pared protectora y protege a estos organismos.
Por otro lado, la mayoría de los virus son sensibles a diversas concentraciones de alcohol, incluso en el rango del 90%.
Por qué un porcentaje más poderoso puede ser menos efectivo para ciertos virus
Puede parecer contradictorio, pero en algunos casos, incluso en términos de prevenir la propagación de la COVID-19, el 99% de isopropanol es una solución alcohólica demasiado poderosa.
En pocas palabras, descompone el exterior de la célula antes de que pueda penetrar en el germen en cuestión. Por otro lado, el 70% de alcohol es la mezcla perfecta de alcohol y agua para atravesar la membrana celular, atacando así a toda la célula y matando las bacterias.
Sin embargo, esta regla general depende del virus en cuestión. Los virus con estructura de envoltura, como el resfriado común y el coronavirus, se pueden descomponer con soluciones de alcohol del 60% por ciento o más.
Sin embargo, existen otras estructuras virales, como el norovirus, que no se pueden matar con el uso de ninguna concentración de alcohol. Es ahí donde el lavado de manos resulta el método más eficaz para eliminar todas las formas de virus y bacterias.
Entonces, ¿para qué se usan las concentraciones más altas de alcohol?
El alcohol isopropílico al 99% resulta ideal como disolvente o agente de limpieza para las industrias que producen artículos sensibles al agua, por lo que la evaporación rápida y el bajo contenido de agua son favorables.
