Apicultura urbana: Cultiva tu propia miel en el tejado de tu casa

Publicado 25 junio, 2019 por Vanessa P.
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En los últimos años, parece que estamos intentando recuperar la naturaleza e integrarla en las grandes ciudades. Algunas propuestas que forman parte de esta idea de que las ciudades ganen en atractivo y produzcan más beneficios, son los huertos urbanos y la apicultura urbana.

Ya sea como afición, terapia para deshacerse del estrés o como trabajo, tanto los huertos como las colmenas en las azoteas y entre los edificios se están convirtiendo cada vez más en algo que forma parte del paisaje en algunas ciudades de millones de habitantes. También como una forma de asegurarse de que la miel que tomas es de calidad y no es falsa.

¿Qué es la apicultura urbana?

La apicultura urbana es, para aquellos que la practican, una forma de proteger a las abejas de la extinción, de salvar el planeta y de producir una miel propia y de calidad. Se basa en instalar colmenas en jardines, parques y azoteas de edificios de las ciudades para que entre diferentes personas se cuide de las abejas y se obtenga miel.

¿Dónde se ha popularizado?

La popularidad de la apicultura urbana comenzó a dispararse hace aproximadamente una década. Fue entonces cuando se supo que las colonias de abejas estaban viéndose drásticamente reducidas.

Para detener esta potencial catástrofe ambiental, se creó una campaña en Estados Unidos en la que se pidió a la gente que ayudara en lo posible y construyera colmenas en sus jardines y patios. Esto se extendió hacia otros países como Reino Unido y Alemania. A día de hoy, en Birmingham viven más de 50000 abejas urbanas, y Berlín es la capital de la apicultura urbana.

¿Por qué es buena la apicultura en las azoteas?

La apicultura en las azoteas es muy beneficiosa para el ecosistema porque las plantas de ciudad también necesitan ser polinizadas. Además, es una forma de mantener a las abejas a salvo de la extinción y actuando con responsabilidad, es totalmente inofensiva.

¿Cómo se hospedan las abejas y se extrae la miel?

El sistema tradicional

La colmena tradicional está formada por un tronco hueco de un metro de altura, que tiene dos aberturas que se tapan con piedra y se sellan con barro y excrementos de vaca. Dentro, para que las abejas sujeten los paneles, se colocan varios palos entrecruzados a media altura.

Desde el siglo XX se usan más las colmenas de madera con cuadros móviles, que se pueden retirar para obtener la miel. Éstas son más fáciles de manejar que las tradicionales y permiten que se obtenga más miel. O quizá para empezar, unos de estos kits puede ser una primera toma de contacto para apicultores amateur.

Beeco System

Es una colmena de observación de abejas diseñada para hacer de la apicultura una afición sencilla. Es una colmena interior o exterior que se monta en la pared y con la que se puede formar módulos de distintos tamaños. Con este sistema, se puede observar el trabajo de las abejas en todo momento y obtener la miel con facilidad, con muy poco mantenimiento.

Honeyflow

Se trata de una colmena automática de la que ya os hablamos hace tiempo. Permite sacar la miel por un grifo, sin abrir la colmena en sí. Al girar la llave del grifo que trae la propia colmena, la miel cae hacia la jarra, siendo un método sencillo para el apicultor. El proceso de extracción se realiza de un modo tan suave que las abejas casi no notan nada.

Aunque no las hemos probado, hemos visto que existen varios vendedores con alternativas más económicas que funcionan de manera similar.

¿Es de calidad la miel procedente de la apicultura urbana?

Muchos aseguran que la miel producida en las ciudades es tan buena o incluso mejor que aquella que se produce en el campo. Esto se debe a que hay más variedad de flores y árboles en las ciudades o lugares cercanos a ciudades, se usan menos pesticidas y herbicidas y los nidos quedan más resguardados y seguros que en el campo.

¿Es legal la apicultura urbana?

En España existe una norma que establece dónde y cómo pueden y deben establecerse las colmenas, independientemente del número de ellas que se instale. Esto incluye las explotaciones de autoconsumo que no sobrepasan las 15 colmenas.

Cuando se sobrepasa la cantidad de colmenas establecida para autoconsumo, no pueden instalarse a menos de 400 metros del casco urbano y menos dentro de él. La apicultura urbana, entonces, no es legal. En cambio, la opción del autoconsumo ha sido aprovechada en Galicia, donde se han instalado diversos colmenares urbanos, ya que la decisión de autorizar la apicultura depende de la administración autonómica.

¿Es peligrosa la apicultura urbana?

La apicultura urbana no es peligrosa si aquellos que la practican tienen un mínimo de consideración y responsabilidad para con los demás vecinos. Lo ideal es que alrededor de las colmenas se coloquen paneles y redes para evitar que el riesgo de picaduras y otras molestias no sea tan alto.

apicultura urbana

El riesgo de picadura, además, es mínimo si se coloca bien la colmena y se cuida a las abejas. Normalmente, las abejas sobrevuelan un perímetro relativamente pequeño a la hora de buscar alimento y solo pican para defenderse. Si la persona responsable de las abejas sabe lo que está haciendo, la apicultura es una actividad valiosa para el medio ambiente que beneficia a la comunidad.

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