Así se tomó una de las mejores fotografías del siglo XX

Publicado 5 diciembre, 2019 por Olivia Martin
Fotografia feto
PUBLICIDAD

Hace 70 años atrás, sin tener tecnologías tan avanzadas como ahora, se creaban obras tan espectaculares y comparables con las modernas.

Una de ellas es “Nace un niño”. Así se tituló el primer proceso que intentó captar, mediante fotografías, las primeras etapas de la vida en el útero de una madre. 

El fotógrafo sueco Lennart Nilsson, que también era científico, fue más allá, más adentro. Pasó 12 años capturando cientos de fotos con el objetivo de narrar la evolución del embrión y su desarrollo hasta el nacimiento. Lennart fue la primera persona en la historia que tuvo éxito en fotografiar el feto humano, literalmente, en el interior del útero.

Más de una década invertida para realizar un vibrante reportaje que recoge, a través de unas de las mejores imágenes de la época, las diferentes etapas del desarrollo embrionario.

Nilsson y su cámara endoscópica

Cámaras

cameralabs.org

El fotógrafo fue capaz de crear imágenes de alta resolución con la ayuda de cámaras convencionales con lentes macros, un endoscopio y un microscopio electrónico de barrido. El trabajo lo desarrolló haciendo una ampliación de las fotos unos cientos de miles de veces.

Todo este proyecto comenzó en los años 50, sin embargo, la primera foto de Nilsson salió en 1965.

Un logro sobresaliente, comparable con los estándares modernos

Este proceso, que significó un gran avance para él y el resto del mundo en fotografía médica, fue publicado en la revista LIFE. En la portada apareció la foto más impresionante del artista: un feto en una vejiga amniótica con un cordón umbilical retorciéndose hacia la placenta. 

El niño por nacer parece vulnerable y al mismo tiempo sereno. Sus ojos están cerrados y sus pequeños puños presionados contra su pecho.

LIFE tituló la fotografía de portada como “Embrión, 18 semanas” y además, publicó un número sensacional en forma de ensayo fotográfico, llamado «El drama de la vida antes del nacimiento».

Las fotos cautivaron la imaginación del público de tal forma que los 8 millones de ejemplares producidos se agotaron en solo cuatro días. Incluso la foto fue recogida por el creciente movimiento antiaborto que estaba en auge en ese momento, y utilizada activamente en sus programas.

Junto con la llegada a la luna y el asesinato de John F. Kennedy, el artículo del fotógrafo sobre las primeras etapas de la vida, constituye una de las historias más importantes de la revista Life.

 

Curiosidades del procesos para realizar estas potentes fotos

Todos los fetos que aparecen en las imágenes, a excepción de uno, habían sido abortados por distintas razones médicas.

El hospital sueco tenía un acuerdo con Nilsson y le avisaba cada vez que había algún feto disponible para fotografiarlo.

Las fotografías se realizaban en una habitación especial con luces y lentes diseñadas para el proyecto.

Las imágenes se inluyeron también en el libro «A child is born» que ha sido publicado en 20 países y lleva ya 5 ediciones.

Lennart Nisson, recibió el título de profesor honorífico por su significativa labor de contribución educativa.

Para lograr esas fotos se tuvieron que hacer disparos de cámara durante varias horas seguidas.

PUBLICIDAD
Otros artículos de esta categoría...