La naturaleza está plagada de multitud de elementos que, aún a día de hoy, con todos los avances y conocimiento a nuestro alcance, siguen siendo todo un misterio. Fenómenos que, en muchos casos, continúan despertando incógnitas pero que, poco a poco, la ciencia se está encargando de revelar.
Esto es precisamente lo que ocurría con los círculos de hadas, los cuáles podemos ver en zonas áridas como el desierto de Namibia (África), o en Australia, cuyo desconocido origen ha conseguido despertar toda clase de teorías. De hecho, muchos hacen acopio de las leyendas para explicar su procedencia, alegando que se trata de las puertas al reino de las hadas. De ahí su nombre.
Sin embargo, un equipo de investigadores parece haber descubierto al fin cómo se forman estas figuras geométricas en los paisajes áridos. Pero antes, veamos qué son:
¿Qué son los círculos de hadas?
MarGomezH
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Los círculos de hadas son, como su propio nombre indica, áreas circulares rodeadas de vegetación perenne, dispuestas en distribución hexagonal. Su diámetro puede variar entre 2 y 35 metros. Muchos de ellos están rodeados por un anillo de vegetación más alto que la hierba anexa, como si fuese una especie de perímetro delimitador con la zona seca.
Lo cierto es que el término círculos de hadas sirve para referirse a cualquier anillo de vegetación producido naturalmente. Sin embargo, muchos de ellos proceden de fenómenos bien descritos, como la acción de ciertos hongos. Otros, no obstante, han sido un misterio durante años, como los de Namibia y Australia. De hecho, hasta hace poco, su origen era un debate abierto y se barajaban múltiples teorías, como que las termitas del subsuelo eran las arquitectas de semejante obra.
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Antes de conocer la investigación que ha dado respuesta a esta incógnita, hablemos de Alan Turing.
Alan Turing, el matemático que descodificó la naturaleza
En 1952 Alan Turing, el matemático y creador de la máquina «Enigma», la cual logró desencriptar los códigos nazis durante la II Guerra Mundial, introdujo el patrón de Turing, por el cual la dinámica de ciertos sistemas uniformes podría dar lugar a patrones estables cuando se perturba.
De hecho, esta base teórica de patrones podemos encontrarla en la naturaleza. El matemático afirmó que, por ejemplo, tanto las rayas de una cebra como la disposición de la espiral de las semillas de un girasol están determinadas por la interacción de moléculas que, al mismo tiempo, interactúan químicamente entre sí.
Así pues, la teoría de Turing puede extrapolarse a multitud de campos, como la biología o la astrofísica, y, según una reciente investigación, resulta que estos famosos círculos de hadas parecen seguir también estos patrones.
Entonces, ¿por qué aparecen los círculos de hadas?
El estudio de campo, publicado en la revista Journal of Ecology recientemente y llevado a cabo por científicos alemanes, australianos e israelíes, concluye que estos círculos tienen este patrón a consecuencia de ciclos de retroalimentación entre la biomasa y el agua en la hierba.
Al parecer, la costra de arcilla que tienen dentro de los círculos genera un suministro extra de agua para la vegetación cercana. Algo que aumenta la sombra y la infiltración de agua en el terreno por sus raíces. Además, encontraron que la cubierta vegetal podría reducir la temperatura del suelo en unos 25ºC en el momento mas caluroso del día, lo que facilita la germinación y crecimiento de nuevas plantas.
Como es lógico, esto supone una ventaja clara relacionada con la necesidad de optimizar la poca humedad de la zona. Por tanto, el suelo se mantiene fértil, a pesar del clima árido y seco reinante.
