Está claro que existen diferentes tipos de orden y de desorden. Hay personas que están obsesionadas con la limpieza y el orden, hay personas que simplemente son ordenadas y prefieren que cada cosa esté en su sitio, hay personas que son un poco desordenadas pero hacen que sus espacios sean manejables y hay personas que son un verdadero caos. ¿Te consideras desordenado o sabes organizar cada aspecto de tu vida a la perfección?
Para las personas desordenadas, mantener cierto grado de caos a su alrededor puede llegar a ser estimulante o incluso relajante. Estas personas suelen encontrar su espacio en medio de cosas colocadas aleatoriamente. En cambio, hay gente a la que ver un lugar desordenado le provoca ansiedad y agobio.
Muchas personas son capaces de encontrar orden en medio del caos
Hay que respetar que cada persona es como es, si bien en estos últimos años, el orden está en pleno apogeo. Solo hay que ver la cantidad de libros, programas de televisión y seminarios que han ido surgiendo para que podamos organizar perfectamente cada aspecto de nuestra vida. El desorden parece verse como una señal de que la persona es perezosa, mientras que el orden aparece como el ideal e incluso una clave para alcanzar el éxito.
A continuación, te mostramos 5 datos curiosos que probablemente no sabías sobre ser desordenado. Si eres una persona ordenada y notas como poco a poco te está comiendo el desorden, deberías preocuparte.
1. Quizás estés deprimido o abrumado
Si hasta ahora eras una persona organizada y ordenada, y de repente has dejado de preocuparte por este asunto, quizás algo preocupante esté sucediendo dentro de ti. A veces, el desorden puede ser un signo de depresión, según la terapeuta Kimberly Hensherson. Si además te notas desesperado, fatigado y con problemas para concentrarte en tus tareas, deberías acudir a un profesional para que te ayude a gestionar tu salud mental. Es posible que el desorden te moleste y te imposibilite seguir adelante. Para volver a ser la persona ordenada que eras necesitarás solucionar los problemas que te estén abrumando.
2. Eres una persona muy creativa y por eso eres desordenado
La investigadora Kathleen Vohs, de la Universidad de Minnesota, ha dirigido una serie de experimentos que muestran que el desorden nos hace ser más creativos y abiertos a nuevas ideas y opciones. Este estudio muestra que ser desordenado no tiene por qué ser necesariamente algo negativo, siempre y cuando no nos moleste que el escritorio esté lleno de papeles por aquí y por allá.
3. No te gusta seguir las normas
Vohs también encontró que las personas desordenadas se sentían más liberadas y menos propensas a cumplir con lo que los demás se esperaban de ellas. Al contrario de lo que nos indica la Teoría de las Ventanas Rotas, vivir en entornos desordenados no tiene por qué hacer que las personas sean más propensas a cometer delitos, según el estudio de la Universidad de Minnesota también puede convertirlas en más innovadoras. Los entornos desordenados alentan a las personas a no seguir las tradiciones.
4. Los estudios indican que las personas desordenadas son menos generosas
Trenta y cuatro estudiantes holandeses fueron evaluados por Kathleen Vohs para ver si el estar en un espacio ordenado tenía algún efecto sobre la necesidad de hacer lo correcto y la generosidad. Efectivamente, así fue. El 82% de los estudiantes de la sala ordenada contribuyeron con su propio dinero en apoyar a una causa justa. Comparado con el 47% de las personas de la sala desordenada que contribuyeron, se nota una amplia diferencia. Esto nos hace deducir que las personas desordenadas terminan siendo menos generosas.
5. Es probable que tomes peores elecciones en un entorno desordenado
Según el estudio realizado por Vohs, si trabajas en un entorno desordenado probablemente tomes decisiones menos saludables para ti. Elegirás comer comida basura en lugar de un aperitivo saludable en los descansos, por ejemplo. A la hora de tomar decisiones, entonces, será mejor que lo hagas en una habitación mejor ordenada.