Hace relativamente poco que superé la treintena y aunque aún no me he hecho a la idea de dejar atrás los 20, si que he comenzado a evaluar mi vida.
Así es como me di cuenta de la cantidad de errores tontos que he cometido en la última década. No son grandes errores, pero si pequeñas cosas que cambiaría si tuviera la oportunidad de volver atrás.
Entre la felicidad del camino recorrido, la satisfacción de ser quien soy y la melancolía de todo aquello que pudo ser y no fue, me decidí a escribirme una carta a mi mismo con todos esos consejos.
Por si a alguien pudieran serle de utilidad, aquí los tiene.
1. Viaja barato y viaja el doble
La década de los 20 años no es época para los lujos, es momento para andar de sol a sol, comer de pie en cualquier sitio, salir de noche y levantarse temprano para seguir conociendo un país nuevo y una cultura diferente.
Ahora no tienes responsabilidad y cargas, por lo que es el momento de ahorrar algo de dinero y lanzarse a descubrir el turismo barato, los hostales y el bus.
No te quedes con las ganas de hacer un inter-rail, y experimentar la vida de mochilero. ¿Cómo vas a decidir lo que te gusta y lo que no si no lo experimentas todo?
No te limites a viajar a lugares importantes.
Viaja a lugares remotos e inaccesibles ahora que dispones de tiempo.
Viaja para aprender y enriquecerte.
Desafíate a ti mismo, prueba cosas nuevas, come comidas extrañas.
Descubre el mundo.
2. Construye cosas para ti
Ya habrá tiempo de trabajar para otros y formar parte de un grupo corporativo en el que la creatividad brille por su ausencia. Pero a los 20 años tienes la oportunidad de formarte y emprender proyectos ilusionantes que redunden en tu beneficio.
Supera el miedo al fracaso, conoce a otros profesionales, empápate de sus ideas. Compagina ideas propias con trabajos esporádicos, y planifica un objetivo a largo plazo, pero no te encierres en un cúbiculo a los 20, no merece la pena.
3. Lee
No seas zoquete y lee. Lee todo lo que puedas, lo más variado posible. Prensa para estar al día de las noticias, internet para saber la verdad y libros para ampliar tu vocabulario.
Aunque creas que lees lo suficiente, no olvides la variedad, o cuando llegues a los 30 notarás las carencias.
4. Deja la televisión
Ahora mismo. Apágala. Enriquécete con el cine, las series y disfruta de tu tiempo libre, pero olvídate de los programas televisivos. Después de un tronista viene otro, después de un Gran hermano 15 el 16.
Deja de contemplar vidas ajenas y dedícate a vivir la tuya.
5. Estudios
Termina tus estudios cuanto antes, y después continúa formándote todos los años. La formación reglada es importante, pero no es la única.
Especialízate y completa tus conocimientos con formación sobre habilidades sociales, crecimiento personal, inteligencia emocional, y tantas otras cosas que no se enseñan en los colegios y universidades.
6. La confianza tiene un precio
Crees que lo justo es darle a la gente tu confianza y retirársela si te traicionan, pero eso es estúpido. Vas a pasarte los 20 años dándote cuenta de que esa manera infantil de construir relaciones sociales y sentimentales no es sana.
La confianza se gana. Requiere conocer a la otra persona, dar y recibir, tener intereses comunes y ser solidarios; y todo eso lleva su tiempo.
Recuerda: todo lo que se construye rápido, desaparece a la misma velocidad.
7. Con los dedos de una mano
Las personas son lo mejor y lo peor de la vida. Algunos te ayudarán a crecer y otros te frenarán.
Aprende a distinguirlos, rodéate de los mejores y de quien más vaya contigo. No tengas reparo en conocer gente nueva y en dejar atrás a quien no sume.
Pues los buenos amigos se pueden contar con los dedos de una mano, y hay que buscar mucho hasta encontrarlos.
8. No pierdas el tiempo y no se lo hagas perder a los demás
Por miedo, conformismo o apego, perdemos un tiempo valioso aferrándonos a cosas, amistades y relaciones sentimentales que llevan heridas de muerte meses.
Engañándonos a nosotros mismo bajo falsas promesas de cambio. Confiando en que las cosas se arreglaran solas o que la otra persona abrirá los ojos y nos valorará de repente.
No pierdas el tiempo. Olvídate de personas que no sean de confianza, amantes que te engañan o trabajos que te hacen infeliz. Invierte ese tiempo en mejorar y encontrar cosas y personas, que merezcan la pena.
No solo por ti, también por los demás. Porque a veces somos nosotros quienes hacemos perder el tiempo a otros, y hay que saber reconocer eso también.
9. Valora el fracaso y aprende del error
Falla, fracasa, equivócate, comete errores, tropieza y levántate. Solemos regodearnos en nuestros fracasos, lamentándonos de ellos sin valorar lo importantes que son.
Lo que puedes aprender de ellos, te va a convertir en el hombre o la mujer que serás mañana. Déjate de lamentos, pierde el miedo a equivocarte y cómete el mundo.
10. Define qué es el éxito para ti
La palabra éxito es increíble, porque cada cual entiende una cosa diferente. Hay quien piensa que el éxito es el dinero, formar familia, tener propiedades, una empresa, un imperio, tener muchos amigos, el amor…
Define el tuyo y persíguelo, pero si me permites un consejo, haz que tu éxito personal no dependa de cosas materiales.
11. Cultiva la paciencia
Juventud, impulsividad e inmediatez parecen ir de la mano. Sin embargo, debes saber que nada valioso se construye de forma apresurada.
Ni los edificios, ni los proyectos, ni las amistades, ni las relaciones, se construyen en un día. Nada.
Planea en décadas, piensa en años, trabaja en meses y vive al día.
Cultiva la paciencia, porque esta cualidad te va a ayudar a tomar muchas y muy buenas decisiones a lo largo de la vida.
Estos son mis consejos, basados en mi vida, pero ¿tú? ¿Qué te dirías a ti mismo?
Fuente: matadornetwork.com
