Una chica mona te añade a su red de amigos en Facebook, no te suena de nada pero decides aceptar. No tarda mucho en hablar contigo, pedirte fotos y mostrarse sexualmente atraída por ti.
Llegados a ese punto, tratará de realizar una vídeo llamada para verte la cara, conocerte mejor y tratar de practicar sexting a través de la webcam. No importa que no llegues tan lejos, con que logre ver tu cara, comenzará un auténtico infierno para ti.
Sextorsión y estafas por la red
Esta chica y tantas otras no son reales, son falsos perfiles gestionados por diversas bandas criminales dedicadas al chantaje y la extorsión a través de internet.
La falsa mujer y sus compinches te amenazarán con publicar tu vídeo privado en Facebook, mandándoselo a tus amistades y contactos profesionales, si no pagas una cantidad de dinero que puede rondar entre los 500 y 1000 euros. Si decides pagar y dar por zanjado el tema, comenzarán a pedirte nuevos pagos cada cierto tiempo.
No importa que sea verdad, basta con que otros lo crean y esa es su mejor arma.
No importa si crees que el vídeo no es para tanto o si ni siquiera fue sexual, ellos se encargaran de editar las imágenes e introducir fotogramas para que parezca que te estabas tocando, o peor aún, que estabas hablando con una menor desnuda. También te amenazarán con inundar la red con tus imágenes y que cualquiera que busque tu nombre en Google, las encuentre.
Juegan con el miedo a que pierdas tu reputación, tu trabajo, tus amistades… la presión es tremenda.
Más habitual de lo que pudieras pensar
Según un estudio realizado por Microsoft sobre delitos cometidos en la red, al menos el 3% de los usuarios de internet han sufrido algún tipo de sextorsión. Solo en Facebook, se producen más de 54.000 casos al mes.
La Policía Nacional estima que unas 6.000 personas se han visto afectadas en España, aunque solo el 30% se ha atrevido a denunciar los hechos.
Las plataformas y redes sociales han implementado medidas en contra de estas prácticas, pero en un mundo anónimo y global, los delincuentes siempre encuentran la forma de continuar operando. Por ello, lo mejor es que los usuarios estén informados y sepan cómo actuar.
Cómo evitar caer en la trampa
Existen varias precauciones que puedes tomar para evitar ser víctima de sextorsión.
1. Trata de no agregar extraños a tu red de amigos
2. Si decides arriesgarte, estudia su perfil con detenimiento
Hay algunos detalles que te pueden ayudar a reconocer un perfil falso, como por ejemplo, que este haya sido creado hace poco tiempo, tenga pocas fotos, publicaciones y casi ningún amigo. Es raro que alguien acabe de descubrir Facebook, y que precisamente haya dado contigo. Desconfía.
También puedes buscar sus fotos en google, ya que estos perfiles falsos suelen nutrirse de imágenes robadas. Si aparecen en webs de dudas reputación o denuncias, ya habrás cazado al mentiroso. Bloquéalo antes de hablar.
3. Ten sentido común y no mantengas videollamadas con desconocidos
No te meterías con un fajo de billetes en el peor barrio del mundo, ¿verdad? Entonces… ¿por qué aceptar una videollamada de quien no conoces?
Sé inteligente y no pongas en riesgo tu reputación por falta de sentido común. La sextorsión existe y cualquier puede ser una víctima. Recuerda que ni siquiera hace falta practicar sexting de verdad.
4. Expón tu caso y denuncia
Si todo lo demás falla, y terminas siendo víctima de esta tropelía tienes dos opciones: pagar o exponerte. Eso sí, elijas lo que elijas, denuncia el caso a la policía y colabora con ellos para que puedan cazar a estos tipejos, cerrar su cuentas y bloquear el flujo de dinero.
Si decides exponerte, minimiza el riesgo y haz público el caso. Avisa a todos tus contactos y explícales que estás siendo víctima de una estafa con chantaje que ya ha sido denunciada. Pide su colaboración para que te avisen si alguna foto o vídeo aparece en la red o un desconocido se pone en contacto con ellos, podrían ser las siguientes víctimas y deberás dar parte a la policía.
Quizá publiquen el contenido de todos modos, pero al menos así, será menos dañino.
