A principios del siglo XX, el desierto de Atacama estuvo sin ver llover durante 173 meses seguidos. Durante ese tiempo, se batió el récord de días sin lluvia en una zona del planeta. Datos como estos son los que convierten al desierto de Atacama en el lugar más árido del planeta.
Afortunadamente, no todo es sequía en este lugar. De vez en cuando, cada tres, cuatro o cinco años, las precipitaciones superan el rango normal para el desierto y aparece una gran diversidad de flores que cubren su suelo. Este fenómeno se llama «desierto florido» y convierte a este y a otros desiertos del mundo, como los de Australia y Estados Unidos, en un lugar colorido y digno de ver.
Así es el desierto de Atacama de manera habitual
…pero cuando llueve, cada 4 o 5 años, se cubre de flores
El fenómeno del desierto florido es un acontecimiento que sucede cada pocos años y que está relacionado con el evento de El Niño. El Niño implica un sobrecalentamiento de las corrientes marinas del litoral de Chile, lo que hace que aumenten las precipitaciones. Este incremento en las lluvias provoca la aparición de más de 200 especies de flores, algunas de ellas endémicas.
La aparición de flores en el desierto de Atacama permitía en la antigüedad que se utilizara un camino existente entre Copiapó y Vallenar, también llamado «camino de la travesía». Desde el siglo XVII, los colonialistas españoles comenzaron a recolectar especies de flores en Atacama, y poco a poco tanto los europeos como los chilenos fueron desentrañando los misterios que rodeaban a este fenómeno de floración.
Las plantas endémicas de Atacama soportan durante años grandes sequías y cambios de temperatura para terminar floreciendo
La resistencia de las plantas endémicas del desierto de Atacama es envidiable. Las semillas de más de 1800 especies soportan en un estado de adormecimiento condiciones climáticas extremas, como son los cambios de temperatura y la sequía, durante años. Finalmente, y cuando se dan las condiciones climáticas adecuadas, terminan floreciendo durante un par de meses.
Las encargadas de iniciar la floración son las especies bulbosas, como las añañucas amarillas y rojas, y el huille de flores blancas. Después, aparecen las patas de guanaco, los suspiros lilas y celestes, las don Diego de la noche, las malvavillas, las coronillas del fraile, los cartuchos amarillos, los lirios amarillos y las orejas de zorro. Dependiendo de la zona del desierto, predominan unas flores u otras, y van floreciendo poco a poco.
Más de 200 especies flores cubren el desierto, pero no de forma anual
La floración en el desierto de Atacama se ha producido en 1983, 1987, 1991, 1995, 1997, 2000, 2002 y 2015. Justamente en 2015 se dio un fenómeno excepcional, y es que hubo dos floraciones en el mismo año. La primera aparición de flores ocurrió entre abril y mayo, y la segunda entre septiembre y octubre. Si ya es extraño que aparezcan flores en el desierto más árido del mundo, que esto ocurra dos veces en un tramo de doce meses es altamente improbable.
Actualmente, el desierto florido es un área protegida y de interés turístico debido a la importancia de su biodiversidad. Está prohibido extraer o cazar especies de animales y plantas nativas. El desierto de Atacama un lugar digno de ser visitado, pero siempre respetando a los organismos que habitan en él.
