ImagenHajotthu/Wikimedia Commons
Cuando Peter Rusell, un ex funcionario británico, subió a su twitter en octubre la imagen de este cuadro, no se imaginaba el revuelo que produciría después.
El cuadro se llama «la esperada» (The Expected One) y la gente enseguida se asombró creyendo ver a una chica dando un paseo mientras tiene en sus manos un móvil. Podría ser cierto de no ser porque la pintura data de 1860 y es obra del pintor austriaco Ferdinand Georg Waldmüller.
Toda clase de ideas conspiranoicas inundaron la red por un momento, que si es una viajera del tiempo, que si claramente esta mirando un móvil, etc.
Gerald Weinpolter, experto en arte y CEO de la agencia austrian-paintings explica a Motherboard que lo que lleva en las manos es un misal, y nada más. Dicho misal es un libro litúrgico con contenido ceremonial de uso católico.
Pero como la explicación más sencilla, y a menudo la correcta, es aburrida, preferimos desarrollar nuestra propia teoría aunque sea totalmente absurda y carente de sentido racional.
Y, por si esto fuera poco, lo mismo ocurrió con la siguiente obra de el cuadro Mr. Pynchon and the Settling of Springfield donde vemos a un nativo americano sujetando un pequeño objeto rectangular que desde luego parece un smartphone.
Foto: US Postal Service / David Sansbury
Nada más lejos de la realidad, lo que sujeta es un espejo, simplemente.
Sentimos decepcionar a alguien…
Fuente: Gizmono