Increíble pero cierto. Sin embargo, debemos partir de la base de que los científicos denominan «luna» a cualquier cuerpo celeste que se encuentre girando en la órbita de un planeta. Por tanto, no nos referimos a un satélite como en el caso de nuestra querida Luna, sino más bien a un asteroide con un diámetro de unos cinco metros que orbita alrededor del Sol. No obstante, cada 20 años, dicho asteroide abandona esta ruta para entrar en nuestra órbita.
Se espera que 2006RH120 -denominado así en 2008, después de descartar que se trataba de un planeta menor-, avistado por primera vez el 14 de septiembre de 2006 por la cámara Schmidt del Catalina Sky Survey de Arizona (EEUU), vuelva a visitarnos en 2027. La última vez que estuvo cerca de nosotros fue entre 2006 y 2007. Cálculos orbitales preliminares indicaron que fue capturado por la gravedad de la Tierra desde la órbita solar durante un período de unos 11 meses.
Un fenómeno más común de lo que cabía esperar
Los modelos de ordenador de los astrofísicos Mikael Granvik, Vaubaillon Jeremie y Robert Jedicke, de la Universidad de Cornell, sugieren que estos satélites temporales deben ser bastante comunes.
Tales objetos, que permanecen en órbita durante diez meses de forma promedio, podrían convertirse en objetivos relativamente fáciles de alcanzar mediante exploraciones espaciales tripuladas, antes de que el cuerpo celeste regrese nuevamente a su órbita solar.
Sin duda alguna, este tipo de descubrimientos siempre levantan sentimientos de entusiasmo entre los miembros que componen la comunidad científica, ya que aún nos queda mucho por conocer sobre la formación de nuestro Sistema Solar y del Universo.
De hecho, en noviembre de 2014 se llevó a cabo el primer aterrizaje sobre la superficie de un cometa, una misión a cargo de la Agencia Espacial Europea, en la que el módulo de aterrizaje de la sonda espacial Rosetta aterrizó en el cometa 67p/Churyumov-Gerasimenko. Fue un hito histórico, ya que los cometas están compuestos por lo que muchos llaman «la materia primigenia del Universo» por lo que puede darnos infinidad de datos sobre el origen de todo.
Fuentes: universetoday, Wikipedia (2006 RH120), taringa
