La Iglesia del Santo Sepulcro en Israel, propuesta como sitio de la muerte y resurrección de Jesús, un lugar sagrado del cristianismo es también sitio de reposo de una escalera que permanece ahí, según la primera evidencia, desde 1852.
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“La escalera inamovible”, como se le conoce, se ubica en la ventana derecha de la fachada principal del templo y ha sido movida solo en tres ocasiones. La primera fue a principio de los 80 en un intento de robo fallido ya que el autor fue detenido de inmediato por la policía israelí. La segunda cuando un bromista logró esconderla durante unas semanas hasta devolverla a su sitio; y, por último, en 2009 que un grupo de obreros la movió para trabajar en el campanario.
¿Cómo llegó ahí y la escalera y por qué nadie la quita?
Alguien la colocó contra la pared de la iglesia, pero no están seguros de quién fue, o más importante, a qué religión pertenecía. En el siglo XVIII, durante el reinado del sultán otomano Osman III, se firmó forzosamente el Acuerdo del Status Quo. Este consistía en dividir Jerusalén en cuadrantes en el que ninguna religión podría lograr una clara ventaja sobre las demás. También se decretó que quienquiera que controlase cierta área en un momento determinado, la controlaría indefinidamente.
Por tanto, nadie se atreve a tocar la escalera no sea que perturbe el statu quo y provoque la ira de los demás. Que el objeto permanezca durante años en la iglesia es resultado de la terquedad religiosa llevada al extremo.
La escalera permanece ahí desde hace siglos y nada tiene que ver con devociones
El cristianismo está siempre sujeto a la fragmentación creando numerosas denominaciones que afirman ser la única y verdadera. Una lucha constante por el dominio sobre los lugares sagrados en Tierra Santa.
En la actualidad todo el cuidado del edificio del Santo Sepulcro se comparte por no menos de seis denominaciones y se divide en secciones dedicadas a cada una de ellas. Principalmente por la Iglesia Ortodoxa Griega, Apostólica Armenia y Católica Romana.
La división de poderes hace imposible cualquier acuerdo sobre renovaciones o reparaciones en el edificio. La iglesia está en un estado de decadencia como resultado; y la escalera, ahora famosa en todo el mundo, permanecerá en un su sitio mientras no se resuelva la disputa.
Un icono de la división religiosa
El mueble inamovible, aunque parece ajeno al lugar sagrado, es en la actualidad uno de los símbolos más poderosos e icónicos de estas divisiones religiosas. Todo lo que se haga debe ser consensuado por los representantes locales de las tres grandes religiones monoteístas, lo que termina en que nadie toca nada…
Un ejemplo han sido las recientes obras de restauración de la considerada, por las tres religiones, como la tumba de Jesús, debido a las posibilidades de derrumbamiento de la estructura de mármol que la recubría. No fue fácil el consenso y la restauración se hizo entre férreas condiciones y en todo momento exigieron supervisión constante de todas las representaciones religiosas, a la vez…
