Este es el inspirador y vital último mensaje de una víctima del cáncer de 27 años que nadie debe dejar de leer

Publicado 10 enero, 2018 por Pablo
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Por desgracia, el cáncer continúa siendo un gran problema de salud pública y sigue dejando víctimas a diario. A veces, incluso personas realmente jóvenes que pierden la vida demasiado pronto. Es el caso de Holly Butcher, que sufría un raro cáncer de huesos y que finalmente ha acabado con su vida. Horas antes de morir, se despidió con un mensaje en Facebook que no deja indiferente a nadie que lo lee, y que ya ha sido compartido más de 100.000 veces en la red social. Tan estremecedor como inspirador, supone un canto a la vida y un recordatorio de que debemos disfrutarla al máximo, sin perdernos en asuntos sin importancia.

Este es el mensaje íntegro que publico Holly:

Un pequeño consejo de vida de parte de Hol:

Es una cosa extraña tomar conciencia y aceptar tu mortalidad a los 26 años. Es una de esas cosas que, simplemente, ignoras. Los días pasan y tú esperas que sigan pasando; hasta que lo inesperado ocurre. Siempre me imaginé envejeciendo, con arrugas y el pelo gris, rodeada de una hermosa familia (con muchos hijos) que planeé junto al amor de mi vida. Quiero eso tanto que duele.

Esa es la cuestión acerca de la vida: Es frágil, preciosa e impredecible, y cada día es un regalo, no un derecho.

Tengo 27 años ahora. No quiero irme. Me encanta mi vida. Soy feliz. Le debo todo eso a mis seres queridos. Pero se escapa a mi control.

No empecé esta «nota antes de morir» por lo que se teme de la muerte. Me gusta el hecho de que somos mayormente ignorantes ante su inevitabilidad. Excepto cuando quiero hablar de ello y es tratada como un tema tabú que nunca nos ocurrirá a ninguno de nosotros. Eso ha sido duro. Sólo quiero que las personas dejen de preocuparse de las cosas pequeñas, insignificantes y estresantes de la vida y traten de recordar que todos compartimos el mismo destino después de todo, por lo que debemos hacer nuestro tiempo grandioso y provechoso, obviando las gilipolleces.

He dejado caer muchos de mis pensamientos aquí porque he tenido tiempo de reflexionar mucho sobre la vida en los últimos meses. Por supuesto, es en mitad de la noche cuando estos pensamientos aleatorios se cuelan en mi cabeza.

En esos momentos que pierdes con las cosas ridículas (algo de lo que me he dado cuenta muchas veces en los últimos meses), simplemente piensa en alguien que realmente esté afrontando un problema. Sé agradecido por tu pequeño contratiempo y supéralo. Está bien saber que algo es molesto, pero trata de no arrastrarlo y afectar negativamente en los días de otras personas.

Cuando hagas eso, sal fuera y aspira una gran bocanada de aire fresco en tus pulmones, mira qué azul es el cielo y qué verdes los árboles; es tan hermoso. Piensa lo afortunado que eres por poder hacer eso: respirar.

Puedes haber quedado atrapado en un atasco hoy, o haber dormido mal porque tus hermosos bebés te han mantenido despierto, o tu peluquero te cortó el pelo demasiado. Tus nuevas uñas postivas pueden tener una rotura, tus pechos son muy pequeños o tienes celulitis en el trasero y tu barriga es flacida.

Deja atrás toda esa mierda. Te juro que no estarás pensando en esas cosas cuando te llegue el turno de irte. Es todo TAN insignificante cuando miras la vida en su conjunto. Estoy viendo mi cuerpo arruinarse sin poder hacer nada al respecto, y todo lo que deseo es que ojalá pudiera tener otro cumpleaños u otra Navidad con mi familia, o simplemente un día más con mi pareja y mi perro. Sólo uno.

Oigo a la gente quejarse acerca de lo terrible que es su trabajo, o lo duro que es hacer ejercicio. Sé agradecido de que físicamente puedes hacerlo. El trabajo y el ejercicio pueden parecer cosas triviales… hasta que tu cuerpo no te permite hacer ninguna de las dos.

He tratado de vivir una vida saludable, de hecho, quizá era mi mayor pasión. Aprecia tu buena salud y tu cuerpo funcional incluso si no estás en tu talla ideal. Deja eso atrás y asimila lo asombroso que es. Muévelo y nútrelo con alimentos frescos. No te obsesiones con eso.

Recuerda que hay más aspectos para la buena salud que el físico. Trabaja duro para conseguir tu felicidad mental, emocional y espiritual, también. De ese modo, te darás cuenta de lo insignificante que es ese estúpido retrato del «cuerpo perfecto» que dan las redes sociales. Sobre esto, borra cualquier cuenta que aparezca en tu timelime y te haga sentir mal. Amigo, o no. Sé brusco por tu bienestar.

Sé agradecido por cada día que no tengas dolor e incluso los días que no estés bien, con gripe o con un tobillo torcido, acepta esa mierda pero sigue agradecido de que tu vida no esté amenazada o desvaneciéndose.

¡Menos quejas, gente! Y más ayudar a los demás.

Da, da, da. Es cierto que ganas más felicidad haciendo cosas para los demás que para ti mismo. Ojalá lo hubiera hecho más. Desde que estoy enferma, he conocido a las más increíbles y generosas personas y he recibido las mejores y amorosas palabras y apoyo por parte de mi familia, amigos y extraños. Más de las que podría devolver. Nunca olvidaré y estaré eternamente agradecida a esas personas.

Es una cosa extraña tener dinero para gastar al final… cuando estás muriendo. No es una época en que vayas a comprar cosas materiales como usualmente harías, como un vestido nuevo. Te hace pensar lo absurdo que es pensar que merece la pena gastar tanto dinero en ropa nueva y «cosas» en nuestras vidas.

Cómprale algo a tu amigo en lugar de otro vestido, producto de belleza o joyas para la próxima boda. 1.- A nadie le importa si te pones algo dos veces. 2.- Sienta bien. Llévalo a comer, o, mejor aún, cocina algo para él. Prepárale un café. Dale o cómprale una planta, un masaje, o una vela y diles que los quieres cuando lo hagas.

Valora el tiempo de los demás. No los tengas esperando porque se te dé fatal ser puntual. Prepárate antes si eres de esas personas y aprecia que tus amigos quieran pasar tiempo contigo, no sentados con ellos mismos, esperando a alguien. ¡Así ganarás respeto! Amén, hermana.

Este año, nuestra familia estuvo de acuerdo en no regalarnos nada, y a pesar de que el árbol está un poco triste y vacío (¡casi colapso en Nochebuena!), fue muy bonito porque la gente no tuvo la presión de las compras, el esfuerzo fue en escribir una bonita tarjeta para los demás. Además, imaginad a mi familia comprándome un regalo sabiendo que se lo quedarían ellos… ¡raro! Puede parecer cursi, pero esas tarjetas significaron para mí mucho más que cualquier compra. Tened en cuenta que fue fácil hacerlo porque no tenemos niños pequeños en casa. De todas maneras, moraleja: los regalos no son necesarios para una buena Navidad. Sigamos.

Gasta dinero en experiencias, o, al menos no dejes pasarlas porque has gastado todo tu dinero en chorradas materiales.

Haz el esfuerzo de hacer ese viaje a la playa que siempre aplazas. Mete tus pies en el agua y hunde tus dedos en la arena. Mójate la cara con agua salada.

Disfruta de la naturaleza.

Intenta sólo disfrutar de los momentos, más que de capturarlos a través de la pantalla de tu teléfono. La vida no es para ser vivida a través de una pantalla ni es acerca de conseguir la foto perfecta. ¡Disfrutad el momento, gente! Dejad de tratar de capturarlo para todos los demás.

Pregunta retórica aleatoria. Todas esas horas gastadas en peinarse y maquillarse cada día o para salir una noche, ¿realmente merecen la pena? Nunca entendí esto de las mujeres.

Levántate temprano de vez en cuando y escucha a los pájaros mientras observas los hermosos colores que deja el sol al alzarse.

Escucha música. Escúchala realmente. La música es terapéutica. La vieja es mejor.

Acaricia a tu perro. Esto lo voy a echar de menos.

Habla con tus amigos. Apaga el teléfono. ¿Están bien?

Viaja si quieres hacerlo, no lo hagas si no quieres.

Trabaja para vivir, no vivas para trabajar.

En serio, haz lo que te haga feliz.

Cómete la tarta. No te sientas culpable.

Dí no a las cosas que realmente no quieras hacer.

No te sientas presionado por hacer lo que el resto de la gente piensa que es una vida plena… Podrías querer una vida mediocre y eso también está bien.

Decidle a las personas que queréis que los queréis cada vez que tengáis oportunidad, y amadlos con todo lo que tengáis.

También, recuerda, si algo te hace sentir miserable, tienes el poder de cambiarlo. En el trabajo, en el amor o en lo que sea. Ten el valor de cambiarlo. No sabes el tiempo que tienes en este planeta, así que no lo gastes sintiéndote miserable. Sé que se dice todo el tiempo, pero no podría ser más cierto.

De todos modos, sólo son consejos de vida de una joven. Tómalos o déjalos, ¡no me importa!

Oh, una última cosa. Si puedes, haz algo bueno por la humanidad (y por mí) y empieza a donar sangre regularmente. Te hará sentir bien con el añadido de que salvarás vidas. Creo que es algo un poco desconocido que cada donación salva tres vidas. Es un impacto masivo que cada persona puede llevar a cabo con un proceso realmente simple.

La donación de sangre (más bolsas de las que puedo contar) me han ayudado a estar viva un año extra. Un año por el que estaré siempre agradecida por haberlo podido gastar en La Tierra junto a mi familia, mis amigos y mi perro. Un año que ha tenido algunos de los mejores momentos de mi vida.

Hasta que nos volvamos a ver.

Hol
Xoxo

No te deja indiferente, ¿verdad?

Fuente: Holly Butcher

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