El movimiento Tiny House o de casas pequeñas ya es una realidad firmemente asentada. La idea de «menos espacio, más vida» es un pensamiento que atrae a la gente con espíritu libre e independiente, y no nos extraña, pues este tipo de hogares son el testimonio perfecto de que no hacen falta cientos de metros cuadrados para vivir cómodamente.
Ante todo, estos diseños deben ser inteligentes y funcionales, capaces de albergar en un espacio muy reducido todo aquello que podamos necesitar para vivir modestamente. Las mesas y camas ocultas que aparecen solo cuando son necesarias, los baños con plato de ducha y los compartimentos secretos para guardar nuestras cosas, son una constante en este tipo de casas, donde el espacio prima por encima de todo.
Para que os hagáis una idea mucho más aproximada de lo que os contamos, lo más acertado es que echéis un vistazo a esta maravillosa casa sobre ruedas:
El diseñador de esta casa, Graham Berry, lo llamó «Walden», en honor al famoso libro de Henry David Thoreau
Esta casa debemos incluirla dentro de la categoría «micro» en el movimiento de casas diminutas, con unas medidas de 2×4 m, que suman un total de 8 metros cuadrados
Sin embargo, el interior es impresionante. Dispone de una cama, baño y cocina. Todo un espacio destinado para una persona con espíritu nómada
Lo más sorprendente de todo es que reúne el estilo rústico, bohemio y minimalista, todos ellos dentro de un espacio muy reducido
Por supuesto, las paredes blancas aportan sensación de amplitud
El baño cuenta con un inodoro y ducha de pié, por lo que si vivieseis aquí, tendríais que despediros de los relajantes baños de burbujas
No obstante, podríais saludar sentados desde la ventana, con una mesa plegable donde poder comer, escribir o disfrutar de un buen libro, con un paisaje diferente cada día
La madera de cerezo oscuro y el estaño brillante de la parte exterior, combinan lo urbano con lo rústico para definir el estilo tan caracterísctico de esta casa
Fuente: littlethings
