Las tres jaulas de la iglesia de Münster ahora están vacías, pero hace 500 años no

Publicado 7 abril, 2020 por Vanessa P.
iglesias-jaulas-munster
PUBLICIDAD

En la parte alta de la fachada de la Iglesia de San Lambert, en Münster, hay tres jaulas de hierro colgando. Justo debajo, se encuentra la esfera del reloj que marca el paso de las horas en la ciudad alemana. Actualmente, las tres jaulas están vacías, pero hace quinientos años esto era muy diferente. En su momento, eran el recipiente que contenía los cuerpos de tres revolucionarios mutilados tras liderar una de las revoluciones protestantes más brutales de la Historia.

Münster estaba gobernada por el príncipe-obispo electo Franz von Waldeck, que era tolerante con cualquier clase de fe

En el siglo XVI, Münster estaba gobernada por el príncipe obispo Franz von Waldeck, un católico tolerante con todas las creencias de origen cristiano. Su actitud ambigua hacia los reformistas atrajo a todo tipo de personas, que se sentían libres de profesar su religión sin miedo a las amenazas de persecución.

Y llegó el holandés que lo cambió todo…

En ese momento llegó a la ciudad un holandés, Johan Beukelzoon. Beukelzoon era un anabaptista que había escuchado que la ciudad era respetuosa con todo tipo de doctrinas, incluida la suya, que era una rama del protestantismo.

Juan de Leiden, que era el nombre por el que se conocía a Johan Beukelzoon popularmente, se encontró en Münster con muchos creyentes entusiastas del anabaptismo y otras corrientes novedosas para la época. Poco a poco, se juntó con distintos predicadores locales y comenzó a dar sermones denunciando las doctrinas católicas y promoviendo el anabaptismo.

Juan de Leiden había movilizado a un gran grupo de fanáticos religiosos delirantes que convirtieron la tolerante ciudad en algo muy diferente

Los anabaptistas comenzaron a repartir panfletos por el norte de Alemania, llamando a los pobres de la región a unirse a los ciudadanos de Münster para compartir entre todos sus riquezas y beneficiarse espiritualmente de ser los elegidos del Cielo. En poco tiempo, Juan consiguió movilizar a un gran grupo de fanáticos religiosos que acabaron con la libertad de culto que había existido hasta entonces en Münster.

El príncipe obispo Franz von Waldeck y el concejo municipal terminaron siendo expulsados de su cargo y un nuevo alcalde ocupó el puesto. Los no creyentes en el anabautismo fueron expulsados de la ciudad y sus propiedades quedaron confiscadas. Los anabaptistas comenzaron a llegar en masa desde aldeas vecinas, y las catedrales y monasterios de Münster pasaron a ser el lugar donde se llevaban a cabo los ritos de este nuevo culto imperante.

La poligamia se hizo obligatoria, y el propio Juan tomó dieciséis esposas

Tras este cambio de sentido, se prohibió el dinero en la ciudad y también la propiedad privada. Los libros fueron quemados y Juan de Leiden pasó a ser el líder indiscutible de la ciudad. Tras llegar al poder, estableció una Orden Real con una Corte Real. Se hizo su propio disfraz real y pidió a sus seguidores que estuvieran desnudos y esperaran a la Segunda Venida.

Entre otras normas, de Leiden impuso la poligamia y la pena capital por delitos triviales. Él mismo tenía dieciséis esposas, mientras los ciudadanos de la ciudad que dirigía se morían de hambre por la bajada de suministros.

Franz von Waldeck recuperó la ciudad y los anabaptistas revolucionarios fueron asesinados y expuestos en jaulas que colgaban del campanario de la iglesia de Münster

Después de un año bajo el mandato de Juan de Leiden, von Waldeck consiguió recuperar la ciudad de manos de los rebeldes. En enero de 1536, John de Leiden, Bernhard Knipperdolling  (el que había sido alcalde durante el año de anabaptismo) y Bernhard Krechting (un seguidor prominente) fueron torturados y ejecutados en el mercado de Münster.

Sus cuerpos terminaron expuestos en jaulas de hierro que colgaban del campanario de la Iglesia de San Lambert, donde permanecieron durante cincuenta años. Las jaulas aún cuelgan de ese campanario, pero los cuerpos han desaparecido por completo.

PUBLICIDAD
Otros artículos de esta categoría...