Aunque hay demasiados estudios relacionados a la falla de San Andrés ubicada en el estado de California, su comportamiento todavía es una incógnita y poco pueden estimar al impacto que podría tener en caso de un gran sismo.
La falla tiene una extensión aproximada de 1,300 kilómetros y está categorizada como una de las más peligrosas del mundo, además de tener un desplazamiento entre la placa Norteamericana y del Pacífico.
En los últimos años, su movimiento ha despertado mucha curiosidad a la comunidad científica y académica, pues ambos creen que será la encargada de desencadenar uno de los terremotos más potentes en la historia.
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De acuerdo a lo investigado, el llamado «Big One» tendrá epicentro en el lugar y su magnitud será superior a 9. Una sismóloga del Instituto de Tecnología de California, Estados Unidos, Jennifer Andrews aseguró que «es probable que se produzca un gran terremoto en los próximos 30 años».
Hace un par de años, en el 2008, se compartió un informe por parte del Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS) y alertó a todos sobre un posible sismo de 7.8 grados Richter, causando grandes daños.
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Con más 1,800 muertes, 5,000 heridos y 200 mil millones de dólares en gastos para reconstruir lo perdido. El propio director del Centro Sísmico del Sur de California, Thomas Jordan habló sobre los sismos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, en 1857 y 1906 respectivamente.
«No se trata de si habrá un gran terremoto sino de cuándo ocurrirá», es lo que dicen los geólogos que han estudiado la zona.
El llamado «Big One» («el grande» en español) es un hipotético terremoto que podría azotar el área de california y las zonas aledañas en un futuro, más no se sabe si es cercano o lejano.
Ciudades como Los Ángeles, San Francisco o San Bernardino están construidas peligrosamente cerca de la falla de San Andrés por lo que muchos expertos o aficionados a la geología han mostrado preocupación.
Las estimaciones apuntan a que es probable que el sismo sea de una magnitud mayor a 7.8 grados en la escala y que el impacto directo se lo llevaría Los Ángelos por estar tan cerca. Mientras que los daños serían materiales y podría morir más de 2 mil personas.
