Uno de los mejores sitios para hacer hallazgos es el bosque. También valen sus inmediaciones o un jardín. Esto es lo que le ocurrió a Lana, quien se aventuró a abrir un viejo cobertizo que había cerca del comienzo de un bosque.
Para la fotógrafa Lana Sator no hay lugar que no pueda explorar. Aunque quedan pocos lugares en la Tierra que ella no haya investigado, normalmente está siempre entrando y saliendo de las fábricas antiguas. De hecho, las fábricas de armamento y silos de misiles son sus principales fuentes para conseguir sorprendentes imágenes de antiguos artefactos de la Guerra Fría.
Fue hace unos años, mientras se dirigía a lo profundo de un bosque en busca de nuevos descubrimientos, cuando hizo un inesperado y sorprendente hallazgo dentro de un cobertizo. Lo que allí encontró le dejó impresionada.
Lo primero que vio fue un hueco con escaleras que parecían conducir a alguna parte
Dentro de los túneles encontraron un nuevo mundo
Ella misma supo determinar que eran los restos de un antiguo sistema de minería
Según avanzaba, las cosas iban poniéndose más interesantes
Se veían los raíles por los que avanzaban los carros
Encontró también equipos antiguos
Y detalles en el suelo de su anterior uso
El ambiente era como sacado de una novela
Todo estrecho y oscuro
Con hielo colgando de todas partes
Restos de las estructuras de madera
Debe ser fácil perderse sin pretenderlo
Estos túneles no son para personas con claustrofobia
Más abajo todavía, Lana encontró más maquinaría
Podía verse, con todo lujo de detalles, cómo había sido aquel lugar mucho tiempo atrás
Algunos tramos obligaban a agacharse
Es difícil calcular la longitud de los túneles, pero cortos no eran
Y algunas veces eran callejones sin salida en los que tener mucho cuidado
Fuente: Live Journal