El clima de nuestro país es cálido y quizás por ello nos parece una auténtica temeridad poner a dormir a nuestro bebé a la intemperie, más aún cuando las temperaturas en el exterior rozan los menos 5ºC.
Sin embargo, esta práctica es totalmente normal en los países escandinavos, donde aseguran que la siesta bajo cero no solo es agradable para ellos, sino que les reporta un mejor descanso y que, lejos de enfermarles, protege de infecciones, virus y resfriados. ¿Qué dice la ciencia al respecto?
En los países escandinavos es una práctica tradicional y muy común, colocar a los bebés de menos de tres años a dormir en la intemperie
Tan común, que es la misma guardería la que los saca a dormir la siesta bajo cero durante la temporada de invierno
Con temperaturas cercanas y a veces superiores a menos -5ºC
Tampoco es extraño ver a los padres dando un vigorizante y gélido paseo en cochecito a través de la nieve o haciendo recados, dejando a los niños en el exterior del edificio mientras ellos pasan a comprar
Obviamente los bebés llevan ropa de abrigo
Y los carros están convenientemente adaptados para surcar la nieve sin problemas
Además de las siestas, no es extraño jugar con los bebés en el exterior
El tiempo de siesta bajo cero oscila entre los 90 y 180 minutos, dependiendo de los quehaceres de los padres y de si hace ventisca o no
Lo normal es que esta siesta se realice entre las 9:00 y las 15:00 horas, siempre durante el día
Según ellos esto no es nada peligroso y es una costumbre que se realiza desde la antigüedad
Ahora la ciencia parece otorgarles la razón, pues la investigadora Marjo Tourula ha constatado que es cierto que los niños a la intemperie duermen más y mejor, mientras que si son acostados en el interior sus siestas son más cortas
No existen pruebas concluyentes de que el frío mejore su sistema inmunitario…
…pero si es cierto que los bebés que siguen esta costumbre sufren menos enfermedades que los que no la practican
Sin embargo, la pediatra Margareta Blennow considera que los beneficios saludables de esta práctica no se deben al frío en sí mismo,
…sino a las condiciones ambientales y las circunstancias que lo acompañan
Según la doctora, al dormir en el exterior, la presencia de insectos o picaduras se reduce y con ella la transmisión de enfermedades que necesitan del calor del hogar para desarrollarse
Por otro lado, la apretada ropa de abrigo que les protege e inmoviliza del frío, favorece el descanso
Algo que muchos padres ya están comprobando en casa cuando envuelven a sus hijos
Y tú, ¿qué opinas? Te parece acertado o peligroso poner a los bebés a dormir a bajas temperaturas
