En general, pensamos poco en el estado de nuestros productos de maquillaje y de las brochas y esponjas que utilizamos para aplicarlos, a menos que nos dediquemos al maquillaje de manera profesional. Si nos parásemos a pensar detenidamente en la cantidad de veces que usamos los mismos productos con brochas o esponjas que hace bastante tiempo que no lavamos, estaríamos horrorizados.
Igual que lavamos la funda de la almohada y las toallas, deberíamos limpiar también los materiales que usamos para aplicarnos el maquillaje. Pero, ¿qué hay de esos productos que utilizamos cuando hemos estado enfermos? Una experta ha hablado con The Indepedent acerca de este asunto.
Tus pintalabios y productos labiales podrían hacer que volvieras a enfermar
Morgan Statt, que trabaja para ConsumerSafety.org, nos habla de los gérmenes que se encuentran en nuestro maquillaje, especialmente en los labiales. Los labios son una vía directa a nuestro sistema respiratorio y si utilizamos productos sobre los cuales es posible que hayamos dejado el virus del resfriado o del herpes simple mientras estábamos enfermos, aumentamos el riesgo de enfermar de nuevo. Además, los virus pueden penetrar también por las fisuras de los labios y éstas aumentan cuando atravesamos alguna enfermedad.
Según Statt, deberíamos deshacernos de cualquier producto que hayamos aplicado sobre nuestros labios estando enfermos, ya que los gérmenes viviendo en esos cosméticos pueden hacer que enfermemos de nuevo. Sabemos que puede ser duro tirar a la basura nuestro pintalabios favorito, la vaselina que mejor nos funciona o productos que simplemente acabamos de estrenar. Por eso, según recomienda el dermatólogo Joshua Zeichner, una opción para salvar las barras de labios es cortar la parte de arriba y desinfectar con alcohol la tapa y la parte que ha contactado con nuestra piel durante 30 segundos. Al menos esto es lo que recomienda el dermatólogo Joshua Zeichner.
No sólo los pintalabios son peligrosos: estamos en la misma situación con los productos que aplicamos en los ojos, sobre todo la máscara de pestañas. Las infecciones de los ojos, como la conjuntivitis, son altamente contagiosas, por lo que no deberíamos pensarnos dos veces el deshacernos por completo de estos cosméticos. El dermatólogo Alan Parks está de acuerdo con Statt en que estamos corriendo un riesgo innecesario al utilizar sobre los ojos maquillaje del cual hicimos uso estando enfermos. Otro tanto opina la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA).
Según un microbiólogo, no hace falta que tiremos nuestros cosméticos
Jason Tetro, microbiólogo canadiense, afirma que los virus pueden vivir en los pintalabios, pero tampoco es necesario tirarlos cada vez que enfermemos. Hay cosméticos que tienen conservantes antimicrobianos que impiden que los virus crezcan y se propaguen, pero tardan un tiempo en actuar. Entonces, tenemos que mirar cuánto tiempo viven los diferentes virus y bacterias antes de volver a utilizar un producto que usamos mientras atravesábamos un proceso vírico.
Atendiendo al virus del resfriado y la fiebre común, éstos viven apenas unas horas. Sin embargo, el virus del herpes y los patógenos de las paperas pueden llegar a vivir en tu pintalabios varios días.
En palabras del propio Tetro y para alivio de todos, no es necesario que nos deshagamos de nuestro maquillaje, pero sí deberíamos dejarlos descansar al menos una semana después de habernos recuperado, de manera que los componentes antimicrobianos actúen haciendo que los gérmenes desaparezcan. Morgan Statt puntualiza que, si bien esto es cierto, tras uno o dos años, esos componentes pueden volverse ineficaces, por lo que sí sería recomendable tirar esos cosméticos, ya que las probabilidades de que estén contaminados son muy altas.
Una buena forma de evitar en la medida de lo posible contaminar nuestros labiales es aplicarlos con ayuda de un pincel que se puede desinfectar tras cada uso sin problema. ¡Hay quienes incluso aplican las barras de labios con papel!
También es muy importante recordar que no debemos compartir nuestros cosméticos con otras personas si los hemos usado estando enfermos. En general, no deberíamos compartir productos que estén en contacto con nuestra piel, nuestros ojos o nuestra boca, ya que pueden estar contaminados por nosotros mismos o por la persona con la que compartimos ese cosmético.
