Aprende a rizarte el pelo con papel de aluminio, agua y un peine

Hay mucha gente que opta por la comodidad de peinarse siempre de la misma forma o que apuesta por un tipo de maquillaje o ropa que sabe que le favorece. A otras personas les gusta cambiar de look habitualmente, probar nuevas técnicas, colores o estilos que renueven su imagen y le saquen de la rutina.

Si eres de estas últimas y tu pelo es liso o no tiene una forma definida, el truco que te vamos a enseñar hoy te va a encantar, pues es una alternativa fantástica y cómoda para lucir unos rizos definidos y duraderos sin mucho esfuerzo. Hoy vamos a ver cómo rizar el pelo usando papel de aluminio.

¿Que cuáles son las ventajas de usar este método? Para empezar, no dañaréis vuestro cabello con productos químicos a fin de conseguir el rizo deseado y, por tanto, no tendréis que invertir ni un céntimo en peluquerías o productos. Además, si lo hacéis por la noche, podéis marcharos a dormir despreocupadamente, pues 5 minutos después de despertaros estaréis luciendo unos rizos perfectos.

Además, lo único que vais a necesitar es un rollo de papel de aluminio, un bote de agua con atomizador y un peine. ¡Nada más! Ahora veamos, paso a paso, cómo poner en práctica este sencillo método.

Corta trozos de papel de aluminio a tamaño cuartilla. Lo más conveniente es ir haciéndolos uno a uno y según los vayas necesitando, hasta que sepas aproximadamente cuántos vas a utilizar

Con cada trozo, haz un canuto como el que ves en la imagen, y dobla una de sus puntas como el mango de un paraguas

Divide tu cabello en secciones y utiliza mechones del mismo grosor para que todos los rizos sean más o menos del mismo tamaño. Antes de enrollar cada mechón en el canuto de aluminio, humedécelo con agua. Ahora sí, enrolla el mechón hasta el final

Cuando llegues al final, dobla el papel de aluminio para evitar que se deshaga

Continúa mechón a mechón, mojándolos previamente con el atomizador. Tranquila, enseguida aprenderás a hacerlo más rápido

Una vez hayas terminado con la mitad de la cabeza, prosigue con la otra

Debería quedarte algo así. Ahora puedes irte a la cama despreocupada y…

… al día siguiente solo tienes que quitarte los «rulos».

¡Estarás luciendo unos rizos perfectos!

Si te ha quedado alguna duda sobre el procedimiento, puedes resolverlas mirando el vídeo completo:

Vía: Petra Julie
Imágenes: Petra Julie