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Una mujer usa a su marido de modelo para su tienda de ropa, mientras éste duerme plácidamente

Sin duda, la crisis del coronavirus ha afectado gravemente a las ventas de las tiendas y comercios. Tanto es así que estos negocios han tenido que replantear sus métodos y adentrarse más en el mundo online con la ayuda del comercio electrónico.

Este es el caso de una emprendedora de Filipinas, que decidió sacar partido a las redes sociales para vender la ropa de su boutique.

Con creatividad, todo se puede conseguir

Jocelyn May Jazareno Caday es la gerente de la tienda de moda femenina Jo’s Online Shoppe. Debido a la pandemia y a las restricciones de movilidad, no podía contactar con las modelos para que se probaran sus prendas, así que se las ingenió de otra manera.

Un día, Jocelyn encontró a su marido echándose la siesta y decidió aprovechar el momento y convertirlo en su nuevo modelo. Él duerme siempre boca arriba y sin camiseta, con lo que fue fácil ponerle encima un vestido, una camiseta, pantalón, blusa… o lo que hiciera falta.

Vio que el marido ni se inmutaba, por lo que comenzó a echar fotografías de los procesos y a subirlo a las redes sociales.

Las imágenes se volvieron virales al instante

Al subir el book de fotos a su página de Facebook, Jocelyn no se imaginaba lo que podía ocurrir. El post ha llegado hasta el momento a las once mil interacciones, tiene más de seis mil comentarios y se ha compartido veintidós mil veces.

En la publicación, la autora puso como título: “¿No hay maniquí? ¡No hay problema! El esfuerzo es la clave. No es posible que nuestros maridos no nos ayuden, ¿verdad? ¡Aquí tenéis la tendencia de cómo vender ahora!”.

Filipinas, entre los principales exportadores de moda mundiales

Según explican distintos medios, Filipinas estipula que entre los años 2023 y 2025 estará entre los quince principales exportadores mundiales de prendas de moda. Esto significa que las exportaciones tendrían que ascender en un 21,7% al año. Entonces, ¿creéis que más negocios deberían seguir el ejemplo de Jocelyn y animarse a utilizar a sus familiares como maniquís o modelos? ¡Sin lugar a dudas sería un método barato, efectivo y muy divertido!

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