Motoristas rescatan a un zorro que había quedado atrapado en un cepo

Publicado 7 febrero, 2018 por admin
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Es probable que alguna vez hayas oído a alguien quejarse de que la gente no respeta el campo. Y es fácil apreciarlo si sales a dar un paseo por casi cualquier ruta conocida del panorama nacional. Colillas, basura, restos de comida y plásticos, muchos plásticos.

Las agencias de medio ambiente se esfuerzan por proteger los parajes y endurecer las normativas para evitar que destruyamos los ecosistemas mientras damos un paseo. También se encargan de determinar qué vías son aptas para la circulación de motos o quads, con el fin de evitar que estas actividades afecten a la flora y fauna de cada región.

Sin embargo, nadie se para a pensar que quien más daño hace a la naturaleza no son los domingueros que van a comerse un bocadillo mientras les da el aire. Generalmente, la gente que disfruta de la naturaleza también se esfuerza por cuidarla. Tampoco lo son los deportistas -habrá de todo- que organizan rutas con el único fin de pasar un día agradable con amigos haciendo algo que les gusta sin más intención que observar y estar de paso.

La actividad que más afecta a los ecosistemas es la caza, ni más ni menos, y además lo hace de la forma más intrusiva y cruel posible. Los cazadores dejan a su paso trampas y casquillos, cuando no directamente latas de cerveza. Cada año matan a cerca de 20 millones de animales en nuestro país y vierten hasta 6.000 toneladas de plomo a la tierra y al agua.

Además, las malas prácticas de los cazadores pueden poner en peligro a otras personas y animales domésticos que quieren salir a disfrutar de la naturaleza y que muchas veces ven cómo su presencia sobra -además de correr peligro- si es temporada de caza. Por no hablar de la colocación de trampas, pues hay ocasiones que hasta las sitúan cerca de zonas de paso.

Esto es lo que encontró un grupo de motoristas de la región de Murcia cuando salió a hacer una ruta. En mitad de un camino, un zorro aterrorizado tenía una pata atrapada en un cepo.

No lo pensaron mucho y se pusieron a idear cómo rescatarlo. Usando una chaqueta para inmovilizar al animal, consiguieron liberar su pata y lo dejaron escapar. No se sabe qué sería de él, si la herida sanaría o acabaría muriendo de una infección o por no poder cazar, pero el vídeo deja claro que hay gente a la que de verdad le importa la naturaleza.

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