Empezar el día con buen pie puede ser la clave para disfrutar de una jornada placentera y agradable. Pero a veces los días empiezan mal desde el minuto 0.
Encontrarte tu coche abollado es la manera ideal para empezar un mal día. Muchos hemos sufrido esto en nuestras propias carnes y es una sensación mezcla de impotencia y enfado.
En un mundo ideal, todo aquel que golpea un coche dejaría una nota asumiendo su responsabilidad. Lamentablemente nuestro mundo no es como nos gustaría, y lo más normal es que nunca sepamos quién propinó el golpe a nuestro automóvil.
Pero a veces la casualidad juega a nuestro favor y nos da la oportunidad de encontrar una respuesta. Esto es lo que le sucedió al protagonista de nuestra siguiente historia.
Cuando fue a coger su coche por la mañana, se encontró con la puerta del vehículo totalmente hundida. La suerte quiso que el automóvil estuviese aparcado justo frente a una cámara de seguridad. En el vídeo se ve claramente el culpable; una mujer muy feliz que se había tomado alguna copa de más.
Fuente: VehicleMotor, artículo por La Voz del Muro