Ya es invierno, y eso significa tiempo de frío, nevadas y heladas. A muchos nos gusta ver de nevar y salir a hacer muñecos de nieve e innumerables fotos, pero hay dos ciudades de Rusia donde sus habitantes prefieren permanecer en sus casas, más que nada porque las temperaturas llegan a los ¡40 grados bajo cero!
Novosibirsk, capital de óblast y del distrito federal de Siberia, es la tercera ciudad más poblada de Rusia. Destaca por ser el centro industrial, financiero, científico, cultural y de transporte de Siberia. Además, posee la mayor biblioteca de Siberia, la estación de tren más grande de la ruta del Transiberiano y el mayor teatro de ópera y ballet de toda Rusia.
Norilsk es la ciudad con más de 100.000 habitantes más septentrional de La Tierra y una de las únicas urbes con la capa del suelo permanentemente congelada, lo que se conoce como permafrost. Su industria metalúrgica es muy importante y solo puede visitarse solicitando un permiso con antelación.
Imposible desayunar a la intemperie en Novosibirsk. ¡Se congela todo!
Como veis, los cubiertos sujetan la comida ellos solitos
No podrás ni comerte una tortilla ni una tostada
¡Y no hablemos de cocinar unos huevos fritos!
Entre la nieve y la niebla se esconde la ciudad de Norilsk
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Un padre y una hija intentando descubrir qué hay debajo de todo el manto blanco
Algunos tienen menos suerte que otros y tienen que desenterrar su coche de la nieve
Nieva tanto, tanto, que incluso puede llegar a doblar o triplicar tu altura
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Es difícil saber hacia dónde vas si está todo blanco y tapado
Pero no te preocupes, las máquinas quitanieves se encargan de facilitar el camino a los ciudadanos (poco a poco y con muchas horas de trabajo)
No es magia, ¡es la escarcha haciendo de las suyas!
-Oye, ¿y si salimos a dar un paseo? +No me hagas mucho caso, pero creo que ha nevado un poquito…
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