Los niños, la gente y la sociedad pueden ser muy crueles, incluso sin que les mueva la maldad, el grupo siempre suele discriminar al diferente.
De hecho, tener gafas, sobrepeso o ser distinto a la mayoría, puede ser motivo suficiente para tener una infancia un poco más dura que la de los demás.
Conscientes de este fenómeno, Tanya y Adam Phillips, padres de una preciosa niña de 18 meses que posee una gran mancha de nacimiento en su pierna derecha han decidido hacer algo único y precioso para asegurarse de que su hija crezca segura de si misma, tatuarse manchas similares en sus piernas.
Sigue leyendo para conocer su entrañable e inspiradora historia.
Desde el momento en que Honey-Rae nació, supimos que ella era absolutamente perfecta. Era bonita, estaba sana y la queríamos con locura.
Nunca nos preocupó la mancha de nacimiento que Honey-Rae tenia en su piernita derecha, hasta que un día a la salida del supermercado noté como una pareja de ancianos susurraban entre ellos. Angustiada me di cuenta de que señalaban y comentaban sobre la pierna de mi hija. En ese momento supe que la gente es cruel incluso sin darse cuenta.
Mi marido y yo hablamos hablado alguna vez de hacernos un tatuaje a juego, y en ese momento supe que la ya había tomado una decisión: el tatuaje que nos uniría sería el que haría sentir a mi hija completamente normal.
Cuando nuestros tatuajes curaron y la inflamación bajó, se los enseñamos a nuestra hija. Ella lo tocó suavemente y sonrió mientras señalaba su propia pierna. En ese momento supimos que habíamos tomado la decisión correcta.
Fuente: boredpanda.com