He de reconocer que el detective Sherlock Homes es uno de mis personajes de ficción preferidos. Sus historias y todo el ambiente que les rodea me resulta especialmente atractivo. Además las dotes deductivas de las que hace gala son, como poco, sobrehumanas.
A un nivel mucho más amateur están los acertijos que solían aparecer en las revistas juveniles de hace unos años. Recuerdo especialmente al llamado Inspector Varnike. Una suerte de Sherlock Holmes que, semana tras semana, nos proponía nuevos casos a resolver.
Con ayuda de unas imágenes, el enunciado del caso y nuestras propias suposiciones, debíamos utilizar las dotes de deducción para esclarecer los hechos. Hoy os traemos un caso de este famoso detective, a ver si sois capaces de resolverlo.
De Varnike nadie puede escapar
Era un caluroso día de verano. El inspector Varnike estaba de servicio junto a su ayudante personal. Ambos se encontraban persiguiendo a un criminal. Las huellas y las pistas les habían llevado hasta la orilla de un río de aguas rápidas y profundas.
En la orilla había un grupo de bañistas. Varnike y su ayudante se acercaron y les preguntaron.
– Hola chicos, buscamos a un muchacho de vuestra edad. No debe andar muy lejos ¿Habéis visto a alguien sospechoso?
Los jóvenes contestaron que hacía escasos minutos un chico joven había pasado justo delante de ellos.
– El chico se metió al río justo por donde estamos nosotros. ¡Mire, al otro lado! ¡Es ese que sale del agua, dese prisa!.
Los muchachos, muy cooperativos, le ofrecieron el bote al inspector para que pudiese atravesar el río, pero este se negó.
– Deja que huya -dijo el inspector- Ahora voy a hablar con vosotros un poco más.
La pregunta es: ¿Por qué el inspector dejó escapar al muchacho del otro lado del río y se centró en los muchachos de esta orilla? La solución se encuentra al final del artículo.
Un poco más abajo encontraréis la solución y la explicación al caso.
Solución:
La imagen que acompaña este texto nos da una idea de por donde van los tiros. A principio del enunciado hemos dicho que este río era profundo y de aguas rápidas. Los chicos han dicho que el muchacho se había metido al río justo por donde estaban ellos y ahora mismo salía por la otra orilla, justo enfrente de ellos. Esto no es posible porque las aguas rápidas habrían arrastrado al muchacho y habría alcanzado la orilla en un punto más alejado del que estaba.
El delincuente que había escapado era uno de los 3 jóvenes que se encontraba en esta orilla. Por eso el inspector Varnike decide quedarse con ellos y esclarecer todo el asunto.
