¿Qué colchón compro? La guía definitiva para un buen descanso

Publicado 15 noviembre, 2019 por admin
qué colchón comprar
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La compra de un colchón es una tarea difícil y no siempre le damos la importancia ni atención que se merece. Pasamos más de un tercio de nuestras vidas durmiendo y aún así, según un estudio realizado por ASOCAMA (Asociación Española de la cama), más del 30% de la población española se levanta con dolor de espalda o cansado, debido a no tener un colchón adecuado.

Para la elección del colchón perfecto debes tener en cuenta una serie de factores. Te explicamos cómo acertar con el producto adecuado. Porque no hay nada mejor que un sueño reparador.

Factores a tener en cuenta en la elección.

Postura en la que duermes.

  • Si duermes boca arriba lo mejor es escoger un colchón duro para evitar malas posturas de la columna vertebral.
  • Si duermes boca abajo el colchón blando es la mejor opción. Evitarás malas posturas en el cuello y forzar la torsión de la columna.
  • Si tu posición es de lado el colchón de firmeza media es el ideal para ti. Se adaptará mejor a la postura de tus hombros y tus caderas y encontrarás la posición más cómoda de forma fácil y rápida.

El peso y la estatura

  • Si eres una persona ligera y de poco peso lo mejor es un colchón flexible que se adapte a la forma de tu cuerpo para repartir mejor el peso.
  • Si por el contrario eres robusta un  colchón firme, que aporta sujeción y evitar que se hunda en la parte central.
  • En cuanto a la estatura debes de elegir un producto que sea al menos 10 cm mayor que tu. En el caso de que compartas cama, la persona más alta es la que sirve de referencia.

Lugar en el que vives

  • Si vives en un lugar frío o eres una persona friolera los colchones de látex, espuma o material viscoelástico guardan mejor el calor que los de muelle, aportan mejor transpirabilidad y dejan pasar mejor el aire, por lo que son los recomendables para lugares donde las temperaturas son altas o si eres una persona calurosa.
  • La cuestión del movimiento también es importante. Si duermes acompañado o eres de los que se mueven mucho un colchón que aporte firmeza y pueda absorber el movimiento para que no se hunda y para que no os molestéis mutuamente con los cambios de postura.

Firmeza del colchón

La firmeza es la resistencia que tiene el colchón al peso de tu cuerpo. El colchón tiene que repartir adecuadamente el peso del cuerpo, sujetándolo pero sin llegar a ser incómodo.

El colchón perfecto debe de respetar la curvatura natural de la columna vertebral. En colchones demasiado duros el cuerpo no se adapta y adopta una posición rígida, antinatural. Si es demasiado blando se hundirá y curvara en exceso la espalda. Además, aumentará la sensación de calor al no dejar pasar el aire de forma adecuada.

No es tarea fácil saber cuál es el que mejor se adapta a ti. Así que como guía:

  • Colchón firme. Si duermes boca arriba, te mueves mucho o duermes con una persona que lo haga y si pesas más de 80 kg.
  • Colchón blando. Si duermes boca arriba o de lado, pesas menos de 80 kg.

Tipos de colchón

qué colchón elegir

Colchón de muelles

Es el colchón más conocido, por ser también el que más tiempo lleva en el mercado. Pero no por ello está desfasado o es antiguo. La tecnología aplicada en los colchones y los nuevos materiales hacen que un buen colchón de muelles sea tan confortable o incluso más que uno de látex o viscoelástico.

El colchón de muelles está recubierto por una capa de distintos materiales que le dan mayor o menor firmeza, como látex, algodón o viscoelástica. Son colchones bastante firmes y que transpiran muy bien.

Existen tres tipos de colchones de muelles:

  • Muelles independientes, bonel o bicónicos. Son los de muelles clásicos. Son bastante firmes y suelen ser los de precio más asequible.
  • Muelle cilíndrico o embolsado. Son colchones de gran confort. Los muelles van separados dentro de unas fundas independientes, por lo que se evita el molesto ruido que caracteriza a este tipo de colchones. Son ideales para camas de matrimonio, ya que aportan la firmeza necesaria para no notar el movimiento de la otra persona durante la noche. Además tienen una vida muy larga, pudiendo durar más de 12 años si se mantienen en buen estado.
  • Muelle de hilo continuo. Son los más firmes y aportan refuerzo en la zona lumbar, aunque algo rígidos ya que no se amoldan demasiado bien a la curvatura natural del cuerpo. Son muy frescos y transpiran muy bien y suelen tener un precio bastante asequible.

Colchón de espuma de poliuretano

La principal característica de este tipo de colchones es que pesan muy poco y por lo tanto se transportan con facilidad. Por ello también son blandos y vuelven rápidamente a su forma original una vez dejamos de poner el peso en él.

Son la opción más económica y los colchones más básicos. Ideal si tienes un presupuesto bajo o si vas a usarlo de forma esporádica, como cama de invitados o para niños que pesen poco. A mayor densidad mayor firmeza, pero también aumentará su precio.

No son colchones recomendables para personas alérgicas ya que transpiran poco y tienden a acumular bastantes ácaros.

Colchón de látex

Se trata de colchones muy elásticos y con gran transpirabilidad, muy recomendable para personas alérgicas. Además, tienen una alta capacidad de recuperación, por lo que vuelven a su estado original rápidamente, recomendable si te mueves mucho o duermes con una persona que lo haga.

Estos colchones pueden estar fabricados por tres tipos de látex: natural (proviene del árbol del caucho), sintético o una mezcla de ambos. El precio varía en función del tipo de material elegido.

Son colchones que pesan bastante, por lo que son difíciles de manipular. Pero aportan gran confort y mantienen bastante bien el calor.

Si eliges un colchón en el que se mezcle el látex con otros materiales presta atención en que la capa de látex sea al menos de 4 cm, sino no disfrutarás de las cualidades de este material.

Colchón de viscoelástica

El colchón de viscoelástica es conocido por adoptar la misma forma del peso que se le coloque encima, también conocido como «memory foam». Reaccionan al calor corporal y se amoldan para reducir la presión en las zonas del cuerpo de mayor peso.

Son ideales para personas que sufren de dolores musculares o de huesos y absorben muy bien el movimiento, por lo que también se recomienda en caso de camas de matrimonio.

Al ser colchones con una capa de viscoelástica, que puede variar en grosor, tienden a acumular calor, por lo que si vives en un lugar de altas temperaturas lo más recomendable es optar por uno de viscoelástico perforado para aumentar su transpirabilidad.

Consejos antes de comprar un colchón

Está demostrado que la vida útil de un colchón ronda los 10 años, pero tanto si te toca renovar como si es la primera vez que vas a comprarlo, no lo hagas a la ligera, sigue algunos consejos antes de hacerte con uno:

  • Elige el colchón que mejor se adapte a tus necesidades. Si puedes probarlo no dudes en hacerlo, túmbate y ten en cuenta tu peso y estatura, además de si duermes solo o acompañado.
  • Precio. El precio es una cuestión importante, pero no lo es todo. Piensa que vas a pasar más de 10 años de tu vida sobre él, es cuestión de salud, por lo que la inversión en uno de calidad valdrá la pena.
  • Elige la base adecuada. Igual de importante que el colchón es la base: somier de láminas, tabla tapizada, somier de muelles, base articulada…
  • Si vais a dormir juntos dos personas de características corporales muy diferentes, sería bueno plantearse el comprar dos colchones independientes pero unidos, adaptándose a las necesidades de cada uno.

No es una decisión a tomar a la ligera y hay que darle la importancia que se merece ya que no se trata de un «producto de hogar» como otro cualquiera. La elección de un buen colchón es aportar por tu bienestar y salud.

Tanto si dispones de un gran presupuesto como si buscas colchones baratos, no te olvides de probarlo antes para ver que se adapta a tus necesidades.

 

 

 

 

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