Ya casi ha pasado un año desde que el Gobierno de España decretara el estado de alarma por la pandemia del coronavirus. Desde entonces, nos hemos acostumbrado a salir de nuestras casas con la mascarilla puesta, a desinfectarnos las manos con gel hidroalcohólico constantemente y a mantener la distancia de seguridad con las demás personas.
Y como el virus puede estar en cualquier parte, tenemos que ser precavidos, por lo que debemos desechar las mascarillas cada cierto tiempo y tener mucho cuidado con lo que toquemos. Pero, ¿sabes hasta qué punto hay que desinfectarlo todo? Te lo contamos a continuación.
Primero, diferencias entre limpiar y desinfectar
Según el servicio informativo MedlinePlus, mucha gente piensa que limpiar y desinfectar es lo mismo, pero están equivocados. “La limpieza consiste en eliminar la suciedad, el polvo, las migas y los gérmenes de las superficies u objetos con agua y jabón. Esto no necesariamente mata a los gérmenes”. Por otro lado, desinfectar significa “reducir la cantidad de gérmenes a un nivel seguro. Lo que se considera un nivel seguro dependerá de los estándares o requisitos de salud pública en un lugar de trabajo o escuela, entre otros”. Se suele desinfectar con lejía o con un desinfectante concreto.
Si ambas acciones se complementan, el riesgo de exposición al coronavirus se reducirá considerablemente. Estos son algunos consejos de lo que SÍ debemos desinfectar de manera regular:
Cosas por las que NO debemos de preocuparnos por desinfectar
Al principio de la pandemia nos aconsejaban que desinfectáramos todo lo que nos rodeaba para prevenir contagios. Hoy en día, algunos expertos como la epidemióloga Melissa Hawkins afirman que no es necesario, que solo hay que desinfectar lo esencial.
Paquetes que nos llegan por correo
En lugar de desinfectar los paquetes por todos los lados, junto a los productos de su interior, es más útil una buena limpieza de manos antes y después de abrirlo.
Comida del supermercado
Antes nos obsesionábamos con lavar toda la fruta y desinfectar los envoltorios de galletas, envases o bolsas. Como en el caso de los paquetes, basta con lavarse bien las manos. Y si te quieres quedar más tranquilo o tranquila, lava la fruta con agua.
Nuestra ropa
Cuando vamos a tiendas o establecimientos, ¿debemos lavar nuestra ropa después? Si acaso alguien estornuda o tose a nuestro lado, échala a la lavadora. Pero si no, no hay por qué preocuparse. «Las superficies, incluida la tela, deben tener menos prioridad que asegurarse de lavarse las manos, usar mascarilla y mantener una distancia mínima», afirma la epidemióloga.
¿Desinfectamos o no los suelos?
En cuanto a los suelos, debemos centrarnos más en proteger a las personas que en desinfectar allá donde pisemos. Hawkins recuerda: “No tenemos constancia de que las superficies sean las causantes de la propagación, pero sí que tenemos claro que son las personas las súper propagadoras del virus”.
Cosas que SÍ hace falta desinfectar
Te contamos ahora las acciones que sí que puedes seguir haciendo, y que te ayudarán a protegerte del Covid-19.
Manos siempre limpias
Una correcta higiene de manos es la mejor opción para no contraer gérmenes. Conforme explica el Hospital Johns Hopkins, hay que hacerlo “especialmente antes de comer, beber o antes de tocarse la cara. Tenga desinfectante de manos disponible en todo momento y no olvide usarlo frecuente y correctamente. Se debe usar agua y jabón durante 20 segundos y 15 segundos como desinfectante de manos”.
¡No olvides desinfectarlas también después de toser, de sonarte la nariz y de salir de lugares públicos o baños!
Superficies que más tocamos
No hay que obsesionarse con desinfectar cada una de las superficies de nuestra casa. Como indica Apartment Therapy, basta con concentrarse en “desinfectar con regularidad las superficies de alto contacto, como los pomos de las puertas, las manivelas de los grifos, las mesas o los interruptores de la luz”.
Desinfectar la ropa de alguien enfermo
Si convives con una persona enferma, no te olvides de desinfectar su ropa y todo lo que toque, como cubiertos, platos, tazas, etcétera. Según la epidemióloga Melissa Hawkins: “hay que usar guantes y una mascarilla, y lavarse bien las manos después. El ciclo de una lavadora y secadora debería ser suficiente para desinfectar los gérmenes potencialmente dañinos”.
Desinfecta la mascarilla
La doctora Hawkins también recomienda desinfectar la mascarilla de tela con regularidad, y si es quirúrgica tirarla tras cada uso. “Trate de usar una mascarilla limpia todos los días y lávala varias veces a la semana. ¡Y no te toques la cara cuando la lleves! Podrías infectarte con gotitas respiratorias persistentes”.
