Los peines son para peinarse. Esto es algo que, más o menos, todos tenemos claro y no se nos ocurriría ponerlo en duda. Hay peines más grandes, más pequeños, con las púas más separadas, de plástico, de hierro, etc. En resumen, los hay para todos los gustos, usos y colores.
Pero seguro que nadie ha imaginado qué relación puede haber entre este objeto y un tomate, o con un calabacín. No, no hemos perdido la cabeza, de momento, ni tenemos complejo de estilistas de frutas y verduras.
Os mostramos a continuación como cortar una cebolla, un tomate o un limón puede convertirse en la cosa más rápida y sencilla del mundo.
Cortar cebolla en trozos pequeños o en rodajas puede ser una tarea francamente frustrante y lenta
Pero con ayuda de un peine (preferiblemente de púas metálicas) la cosa puede cambiar sustancialmente
Tan solo hay que cortar os 2 extremos de la cebolla y pelarla, como haríamos normalmente
Clavar el peine en ella
Y con ayuda de un cuchillo cortaremos la cebolla en rodajas perfectas
Ya no tendremos problemas a la hora de hacer unos aritos de cebolla rápidamente y perfectos
Si queremos cortar la cebolla en trozos pequeños primero hemos de cortarla por la mitad. Luego la pincharemos en el peine de la misma manera que para las rodajas
Cortaremos primero en el sentido de las púas y luego transversalmente. En pocos segundos tendremos una cebolla cortada en trocitos pequeños
Podemos hacer lo mismo con calabacines
O incluso tomates
Obtendremos unas rodajas perfectas para nuestros sandwiches
Sirve también para los limones de nuestros combinados
Cualquier fruta, hortaliza o verdura, que pueda ser ensartada en el peine, es perfecta para utilizar esta técnica. Si queréis ver como funciona en movimiento, dadle play al siguiente vídeo. Está en inglés, pero no hace falta entender lo que dicen para que la explicación sea lo suficientemente clara.
Fuente: Dave Hax, Artículo por La voz del muro