Es horrible navegar entre los comentarios de periódicos, redes sociales y plataformas de videos web, para darte cuenta de cuanto odio, racismo e intolerancia se esconde en internet.
Amparados bajo un nombre falso, miles de personas recurren al insulto y las amenazas para justificar con argumentos simplistas sus derechos frente a los de otros.
Y es que resulta curioso ver cómo nuestros jóvenes marchan al extranjero en busca de una oportunidad, mientras reforzamos las vayas de Melilla para que otros no entren.
Las fronteras, regulaciones legales y otros artificios humanos creados con el objetivo de poner puertas al mundo, sólo responden a conveniencias sociales y económicas, sólo entienden de dinero.
Por fortuna, a cada mensaje de odio le siguen cientos de paz. Los argumentos simplistas se ven superados por los datos y por el excelente trabajo de las ONGs y grupos de inmigrantes que luchan por combatir los estereotipos y mitos sobre la migración.
Como los datos que esta asociación senegalesa nos explica sobre África y los flujos migratorios con España en este interesante video.
