¿Sabéis que podéis adquirir una mansión victoriana de 1861 por unos irrisorios 50.000 dólares? Y preguntaréis, ¿dónde está la trampa? Bien, al parecer se trata de uno de los lugares más emblemáticos de la ciudad de Auburn, en Nueva York, a solo 4 horas en coche de la gran ciudad, del que las malas lenguas dicen que está habitado por fantasmas.
Pero ¿a quién le importan un puñado de fantasmas, cuando una verdadera maravilla arquitectónica de la Guerra Civil está a la venta por un precio tan bajo? Adentrémonos en esta misteriosa mansión y conozcamos algunos de sus secretos mejor guardados:
La Mansión James Seymour fue construida en 1862. Así es como se veía originalmente
158 años después, así es como luce la casa. No solo sigue en pie, sino que además está muy bien conservada para los años que tiene
La casa fue mandada construir por James Sheldon Seymour, conocido filántropo de la época y fundador de la Biblioteca Seymour y el Hospital de la ciudad de Auburn
Ubicada en el 113 de North Street, la mansión de estilo victoriano cuenta con 557 de metros cuadrados construidos, distribuidos en 4 plantas
En total, la casa cuenta con 10 dormitorios, 5 baños, 4 chimeneas, entre otros, así como los elegantes acabados del interior, gloria de tiempos pasados
La mansión está ubicada en una parcela de más de 4.000, la cual es perfecta para albergar una piscina y pista de tenis
Erigida por el arquitecto John W. Venderbosch, quien también trabajó en la construcción de las iglesias de La Sagrada Familia y Santa María, en la misma localidad, la mansión ha conservado casi todo su carácter original (y posiblemente algunas de las almas de sus antiguos inquilinos)
Como podréis ver, la casa necesita bastantes arreglos por dentro, pero aún se puede percibir la majestuosidad con la que fue construida
Pero, aderosaexchange.comosibles fantasmas, ¿por qué la propiedad es tan barata?
Al parecer, la evaluación de la propiedad fijada en 2019 establece una cuantía de 162.100 dólares, por lo que los impuestos anuales ascienden a la cantidad de 2.000. Al introducir mejoras en la finca, lógicamente estas cantidades aumentarían
Esto hace pensar en si merece la pena arreglarla o dejarla así, guardando su escalofriante encanto
Solo imderosaexchange.comra vida familiar en esta casa histórica, contando historias junto a una de sus 4 chimeneas, pasando los veranos leyendo en el porche y nunca, nunca, yendo al sótano (aunque también debería evitarse el ático)
Su primer propietario, James Seymour, también era conocido en la comunidad por su estrecha amistad con William Seward, antiguo Gobernador de Nueva York y Secretario de Estado de los Estados Unidos bajo el mandato del presidente Abraham Lincoln
La casa es una oportunidad emocionante para alguien que ame las mansiones victorianas clásicas y, al mismo tiempo, sea un apasionado de la historia
Uno de los principales encantos de la casa es su arquitectura, la cual fue erigida sin reparar en gastos, a pesar de ser una época complicada, históricamente hablando
Algunos puntos destacados de la mansión incluyen su torre y ventanas góticas, los arcos redondeados de estilo italiano, el vestíbulo con paneles de nogal, la sala de octogonal o el porche exterior que rodea parte de la propiedad
Otros de sus encantos son la escalera curva hecha a mano, las puertas empotradas y los suelos de madera, así como las 4 chimeneas victorianas de mármol y una hermosa carpintería original personalizada
A esto me refería cuando he dicho que se debería evitar el sótano…
La ciudad de Auburn, Nueva York, es rica en cultura, arte e historia, y ofrece una gran variedad de museos, sitios históricos y lugares de interés nacional
Bien, ¿tenéis 50.000 para invertir y no sabéis que hacer con ellos? Sin duda, esta podría ser una bonita aventura…
Si queréis intentar comprarla, podéis aplicar aquí desde donde rellenar un formulario contando qué vais a hacer con ella y cuánto te piensas gastar en reformarla, entre otras preguntas. No se conoce cuál es el criterio que pondrá esta maravilla en manos de un afortunado comprador, pero ojalá lo sepamos pronto, y si sois vosotros, recordad contádnoslo.
