Las alucinaciones se definen como la percepción, por parte de nuestros sentidos, de estímulos inexistentes. Estos síntomas son frecuentes en personas que sufren psicosis o esquizofrenia y pueden darse de muchas formas distintas.
Los científicos de la Universidad de Cambridge han realizado un estudio conjunto con un equipo de investigadores de la Universidad de Cardiff para estudiar la propensión a sufrir alucinaciones. En el estudió se mostró la siguiente imagen a un grupo de sujetos:
¿Qué ves en esta imagen?
Se les preguntó si podían ver alguna forma reconocible. Primero se hizo la prueba a 18 personas que tenían señales muy tempranas de psicosis y habían sido remitidas por el servicio de salud mental dirigido por la fundación Cambridgeshire y Peterborough. Luego se compararon sus respuestas con las de otros 16 sujetos sanos.
Los resultados indicaron que la gente con síntomas de psicosis tenía una mayor facilidad para ver algo en la imagen que los que individuos que no los tienen. Esto indica que los cerebros de las personas con dichos indiciostrabajan más para dar sentido a los datos que reciben, lo cual favorece el rellenar espacios en blanco con información que realmente no está ahí.
A continuación se les enseñó la siguiente fotografía. Después de verla, los individuos sanos ya fueron capaces de dar sentido a las manchas blancas y negras de la primera imagen en un segundo visionado.
¿Qué significan estos resultados?
Cómo ya hemos dicho antes, ver algo que no está es, básicamente, una de las definiciones de alucinación. Por eso se establece una relación entre que las personas que son capaces de ver al bebé en la primera imagen tienen unas posibilidades superiores a la media de desarrollar psicosis.
Pero tampoco nos asustemos, si habéis conseguido saber qué era la primera fotografía no quiere decir que tengáis algún tipo psicosis o que vayáis a desarrollarla, solo que existe cierta relación.
Según el Doctor Christoph Teufel «La visión es un proceso constructivo, nuestro cerebro es el encargado de fabricar el mundo que vemos. Se rellenan los espacios en blanco, haciendo caso omiso de las cosas que no encajan y se nos presenta una imagen del mundo que ha sido editada y hecha a la medida de lo que esperamos».
Un ejemplo de esto es cuando estás andando a oscuras por tu salón y de repente ves cruzarse una forma negra a toda velocidad que identificas como tu gato. Realmente solo has visto un borrón oscuro, pero tu cerebro ha añadido otra información para que vieses a tu mascota perfectamente.
Fuente: BBC, artículo traducido y adaptado por La Voz del Muro
