Tener una mascota es una gran responsabilidad. Debemos proporcionarle todos los cuidados y atenciones necesarias para que esté sanos y sean felices, así que hay que ser conscientes de que, si adoptamos un animal, este dependerá de nosotros para el resto de su vida.
Muchas veces ocurre que creemos que estamos haciéndolo muy bien con ellos y resulta que no es así. La falta de experiencia y el desconocimiento sobre el animal o la raza suelen ser los motivos fundamentales de estos fallos.
Pero también lo es que tendemos a humanizar a nuestros peludos amigos, haciendo equivalencias entre sus comportamientos y los nuestros. Sin embargo, su lenguaje corporal es, en muchas ocasiones, distinto e incluso radicalmente opuesto al de los humanos.
Si a esto unimos ciertos datos erróneos o incompletos sobre las mascotas que circulan por ahí, el resultado es que nuestras buenas intenciones tal vez le estén haciendo más mal que bien a nuestro querido amigo.
Por este motivo, hoy os traemos 11 cosas que nuestra mascota está tratando de decirnos y que tal vez no hayamos entendido. Poniendo atención a estos comportamientos, haremos que tanto su vida como la nuestra sean mucho mejor.
Puedes comprar cualquier tipo de cepillo en la tienda de mascotas…
Pero debes elegir el más apropiado para mi piel. Los cepillos de goma mejoran la circulación y eliminan suciedad, mientras que los de púas o cerdas fuertes eliminan los pelos muertos.
Si tu juego favorito conmigo es el del puntero láser deberías saber que…
Puedo acabar muy frustrado porque nunca podré atraparlo. Soy un felino y vivo para la caza, así que si vas a utilizar un puntero, por favor, al final utiliza un juguete real. De esta forma siempre tendré algo que atrapar y a lo que darle muerte. Esto hace que el juego merezca la pena.
Me estás dando demasiada comida
Sobre todo si estas intentando entrenarme. Llegará un momento que las chucherías no me motiven, así que haz un pausa y volvamos a empezar otro día o dame otro tipo de recompensa.
Por favor, no me presiones cuando voy al baño
Existe una razón para que los perros demos vueltas antes de empezar a hacer caca: tenemos la capacidad de percibir el campo magnético de la tierra y nos sentimos más cómodos alineándonos con él al hacer nuestras necesidades. De hecho, hay humanos como tú que han investigado esto; estudiaron a 70 de los nuestros y comprobaron que hicimos esto 1893 veces en 2 años.
Puedes pensar que dejarme dormir todo el día es bueno para mí, pero el exceso de horas durmiendo puede afectar a mi personalidad
Una enorme cantidad de problemas de comportamiento de un perro o un gato puede solucionarse con un paseo diario o jugando durante 20 minutos.
Puede que te parezca gracioso cuando arrastro mi trasero por la alfombra…
Pero probablemente significa que tengo picores y algún tipo de parásito. Llévame al veterinario cuanto antes.
Ten cuidado con la ropa interior porque me la puedo comer
Especialmente si ha sido usada hace poco y aún conserva tu olor. Los veterinarios retiran miles de trozos de prendas de los estómagos caninos cada año.
Compra una cama acorde a mis necesidades
Si puedo probarla en la tienda de animales es mucho mejor. Tú me conoces mejor que nadie, sabes si prefiero dormir acurrucado o con las patas estiradas. Dependiendo de eso, compra una cama abierta o una más cerrada.
Si me dejas en el patio trasero de casa cuando tú no estas…
No te engañes creyendo que voy a correr y a jugar. Probablemente me siente en algún lado esperando tu vuelta. A los perros nos gusta tener una casa y muchos de nosotros preferimos estar en el interior, a ser posible contigo.
Si me pongo rígido cuando pasas la mano por mi lomo, algo falla
Un estudio de 2013 publicado en la revista Fisiología y Comportamiento llegó a la conclusión de que los gatos que son acariciados aunque esto no les guste viven más estresados que los gatos a los que sus humanos respetan.
El hecho de que ronroneé no quiere decir siempre que esté feliz y contento
Los gatos también ronroneamos cuando sufrimos algún daño o tenemos miedo. El ronroneo es un mecanismo autocalmante, no solo un síntoma de felicidad, así que estate atento al resto de mis comportamientos.
Fuente: Readers Digest, Artículo traducido y adaptado por La Voz del Muro
