El contouring es una técnica de maquillaje especial que permite corregir defectos y realzar virtudes, gracias al uso de la iluminación con diversos tonos de base.
Es casi como esculpir el rostro y capaz de afinar la nariz, corregir el aspecto de la cara o realzar los pómulos. Por supuesto, la técnica oculta también todas las imperfecciones.
No es necesario aplicar mucho maquillaje, sino saber cómo y dónde hacerlo, aunque en estos ejemplos se ha exagerado con la cantidad para resaltar el resultado. No te lo pierdas.
Cómo os decía, estos ejemplos son algo exagerados para poder apreciar dónde se tiene que aplicar el maquillaje para ver bien sus efectos. En el día a día se debe aplicar menos cantidad para un resultado más natural, como el que podéis observar a continuación.
Fuente: @samerkhouzami / Instagram
Artículo realizado por La Voz del Muro