La historia no es siempre como nos la cuentan; a veces los hechos son distorsionados y terminamos creyendo cosas que son un poco diferentes a cómo en realidad pasaron. Y aunque aún no se ha creado una máquina del tiempo para viajar al pasado y verificar datos históricos, por fortuna existen unos aparatos parecidos.
Hablamos de las cámaras fotográficas. Sí, estos pequeños artefactos que captan la luz y la plasman en una superficie creando una réplica exacta del momento son lo más parecido a una máquina del tiempo. Las fotografías nos permiten «viajar» al pasado pues captan un segundo y un lugar específico, inmortalizándolo en forma de imagen. Así, no importa cuántos años hayan pasado desde el momento que se tomó la fotografía, al verla, fácilmente podrás transportarte a esa época.
Bien dicen que una imagen vale más que mil palabras; y estas fotografías históricas que verás a continuación así te lo demostrarán. Así que echa un vistazo al pasado y deja que estas imágenes cambien tu forma de ver el mundo.
La baja calidad de la imagen se debe a la enorme cantidad de radiación en el ambiente. El rollo fotográfico comenzó a desintegrarse inmediatamente al ser expuesto al aire para tomar la foto, cuyo autor es Igor Kostin.
El árbol aún se mantiene en pie.
Antes de que existieran las alarmas, las personas le pagaban a alguien para que fuera a despertarlos tocando su puerta y su ventana con un palito.