Ya sea en casa o en la oficina, un puesto de trabajo a nuestro gusto, bien organizado y en el que nos sintamos completamente cómodos es fundamental. Y da igual el tipo de trabajo que desempeñes, siempre viene bien disponer de un rincón de la casa donde poner el ordenador, sentarse a redactar una carta, guardar papeles importantes, o terminar algún asunto importante del trabajo desde casa, sin necesidad de ir a la oficina.
Además, tarde o temprano los más pequeños de la casa necesitarán un lugar adecuado en el que sentarse a hacer su tarea y estudiar, aunque antes deberías echar un vistazo a lo que dice le Método Motessori sobre cómo montarle una habitación a un niño y qué necesidades priman frente a otras.
Por todos estos motivos, y porque nos encanta llenaros de inspiración por si algún día decidías emprender alguno de los proyectos que os vamos mostrando, hoy queríamos mostraros estos 20 fantásticos escritorios DIY, que perfectamente podríais emular en vuestros hogares. Solo tienes que elegir los que más te gusten y ponerte manos a la obra:
Para este proyecto, simplemente necesitaréis un escritorio de esquina (como Effective Desk de Ikea) y un par de archivadores de madera. El primer paso es pintar la parte superior del escritorio y los archivadores en blanco. Retira las patas del escritorio y, a continuación, añadir algunos apoyos en la esquina trasera que, en este caso, se han hecho con placas de metal e insertos de una barandilla. Ahora tenéis un escritorio de diseño que luce mejor que nunca.
Este proyecto se llevó a cabo con material de Ikea y piezas de ferretería. Una pieza bastante atractiva y funcional, sin contar con que sale muy económica.
Este proyecto es un poco más elaborado, pero perfectamente factible con un poco de planificación y construcción cuidadosas. Aunque no lo creáis, este diseño nació a raíz de una vieja puerta de madera maciza.
Las patas de caballete se hicieron utilizando tres piezas de pino pegadas entre sí para cada pata. Dos de ellas tienen sus centros huecos para ocultar, de una forma bastante ingeniosa, los cables de alimentación y de Internet. Para la superficie de la mesa, la puerta fue cortada a 71×157 cm y después lijada. Ahora solo quedaba una mano de pintura especial para maderas y listo.
Una buenísima opción si no tienes mucho espacio en casa para una gran mesa de escritorio. No solo te salvará del apuro, sino que dará un toque de estilo en cualquier parte donde decidas poner una. El tablero principal está fabricado con madera de pino laminado y las patas y el resto de piezas con madera de pino normal.
Una manera estilosa y eficaz de tener todos los elementos a la vista y bien organizados, que harán que sigas teniendo espacio libre para el ordenador y el teclado. Simplemente han fijado una mesa típica de Ikea a una estantería, unidas por unas piezas metálicas que hacen que la mesa posea dos alturas, para ganar un poco más de espacio.
Lo que más llama la atención sin duda es la superficie de trabajo, para la que se usaron láminas de acero galvanizado, contrachapado de abedul y, para los bordes de la mesa, ángulos de aluminio. Todo ello sin contar con las piezas de ensamblaje correspondientes.
Una idea fantástica para montar un despacho o una oficina, sin alejarse de la elegancia y el diseño, ya que se pueden incluir varios puestos de trabajo en la misma superficie, en función de los gabinetes que vayáis insertando. Ni qué decir tiene que todas las piezas podéis encontrarlas en Ikea.
Para este proyecto vais a necesitar una mesa normal, y una segunda superficie a la que le pondremos los soportes que veis en la fotografía. Después colocar una sobre la otra, así de fácil.
Para este proyecto se utilizó un soplete para resaltar las vetas poco a poco. Después se procedió con el proceso de tinción, que le da ese acabado a la mesa tan interesante. Para las patas se escogieron dos estructuras metálicas simples, a las que se añadieron baldas de cristal.
Un escritorio moderno y minimalista que podría quedar sensacional en ambientes envejecidos y un tanto decadentes para jugar con los contrastes. Además, se puede plegar por si alguna vez necesitas un poco de espacio extra, o simplemente si te gusta tenerlo todo bien despejado.
No solo es una buena oportunidad de deshacerte de esas viejas estanterías que tanto estabas deseando quitar, sino que además podrías construir fácilmente un escritorio cargado de estilo como este, con un espacio ideal y diáfano para el almacenamiento de cosas, que podrás mantener siempre recogidas dentro de unas cajas o cestas de mimbre.
Uno de nuestros proyectos preferidos y que, aunque pueda parecerlo, no es para nada difícil. Necesitarás una vieja cómoda (que podrás elevar con cuatro patas como la de la imagen si fuera necesario) que lijarás y pintarás para darle un aire completamente nuevo y renovado. Tanto las patas de la mesa como el propio tablero podéis encontrarlos en Ikea. Ahora solo tenéis que unir todas las piezas.
Un diseño muy interesante, que proviene de una mesa de escritorio blanca normal y corriente. Sin embargo, la decoración en los laterales le de un aire fresco y nuevo, que podéis incorporar vosotros mismos con madera de pino delgada, midiendo y cortando a vuestro gusto, y según el diseño que más os guste.
Si queréis un diseño como este, primero tendréis que haceros con unas patas de alguna máquina de coser antigua. Después, lo único que tenéis que hacer es adherirle el tablero que más encaje con vuestra decoración.
Por si no os habíais dado cuenta, las patas y toda la estructura está formada por tuberías. Seguro que nunca pensasteis que unos cuantos tubos galvanizados podrían dar forma a un escritorio inspirador, eficiente y con estilo.
No tiene mucho misterio el proyecto, -cuatro tablas adosadas a la pared y pintadas, literalmente- pero hay que admitir que da un aspecto fantástico al lugar, moderno, fresco e increíblemente chic.
Con una estantería y una mesa cortada por la mitad, podrías conseguir dos sitios individualizados para los más pequeños de la casa, sin alejarse del estilo original de cada uno de los elementos.
Seguro que tenéis alguna de esas viejas mesas de salón desmotada en alguna parte del trastero. Bueno, pues es hora de que la vuelvas a montar y cortes sus extremos. Después lija y pinta como corresponde cada una de las partes y voilà, tendremos dos escritorios o mesas auxiliares de pared gemelas, que son la crème de la crème.
Fuente: homedit
Este artículo fue modificado el 20 junio, 2019 6:00 pm
