Cualquier excusa es buena para realizar un viaje y abandonar el estrés y la rutina por unos días. Aunque, a veces, el problema reside en que estamos cansados de hacer siempre lo mismo cuando salimos de viaje: museos, restaurantes, monumentos, etc. Aquí te proponemos varias alternativas muy originales que, sin duda alguna, despertarán tu curiosidad y las ganas de hacer turismo. Estos lugares se caracterizan por ser tranquilos, solitarios pero sobre todo por estar cargados de romanticismo.
En su mayoría se trata de destinos paradisíacos y aislados, perfectos para desintoxicarte de la rutina. Ubicados en playas, desiertos, montañas, ciudades o selvas, sin duda, todos tienen algo de magia y encanto. Toma nota de aquellos que más te gusten porque algunos de ellos podrían ser tu próximo retiro espiritual o el destino a visitar con tu pareja.
Dedon es un resort situado en una isla privada entre las 7.107 islas del archipiélago de Filipinas. Esta magnífica isla, poblada de selva, podría ser el destino perfecto para tomarte esas merecidas vacaciones.
Caracterizada por su arena blanca y por sus aguas cristalinas, Seaside Beach, es una de las playas más elegantes del mundo y un complemento perfecto para aquellos que no les importa la arena en su trasero.
Esta pequeña casa se alza sobre la costa de California y dispone de un techo desmontable y panorámico del que cuelga la cama, haciendo de ésta el lugar perfecto para observar las estrellas y disfrutar de la brisa de verano con tu pareja.
Con una caída de 60 metros y situada en el río Seljalandsá o río líquido, la cascada de Seljalandsfoss era en otros tiempos una escollera sobre el océano (que en la actualidad se encuentra a varios kilómetros) y hoy marca el límite entre las Tierras Altas y el resto del país. Es posible subir a ella y contemplar el punto en el que el agua se lanza al vacío.
Con sus increíblemente grandes ventanales, esta casa ofrece unas fantásticas vistas de todo el valle.
El monte Rainier es el más alto del estado de Washington y la cordillera de las Cascadas. Sobran palabras para describir este paisaje de cuento.
Un toque modernista en mitad de la naturaleza.
Cherry Springs es uno de los mejores lugares del mundo para ver las estrellas, incluyendo una vista fenomenal de la Vía Láctea.
Esta pequeña y minimalista casa, escondida entre los Alpes austríacos y rodeada de picos montañosos monumentales, es ideal para encontrar un poco la tranquilidad, solo o acompañado, tras un período de estrés.
Situado en el Parque Nacional de Zion, este barranco suele ser el destino perfecto para personas amantes de la naturaleza y que practican deportes de riesgo.
El hotel de hielo es solo para los viajeros más valientes. Para los amantes del frío, este hotel, que está hecho completamente de hielo y que es reconstruido cada año, es una visita obligada.
Tailandia es uno de los destinos más bellos del mundo en cuanto a cultura, playas y parajes naturales donde poder disfrutar de unas merecidas vacaciones.
¿Qué mejor lugar que Hawaii, para ir con tu pareja o hacer surf? La belleza de estas inmensas islas se complementan con este complejo de ambiente romántico, donde la playa está a tan sólo unos pasos de la cama.
Esta pequeña habitación en medio de la nada, es un oasis en el desierto. No todo el mundo tiene la suerte de pasar una noche en una habitación tan acogedora como esta, con vistas al vasto desierto de Arizona.
Este tranquilo retiro situado en lo profundo de la selva es un lugar increíble para escapar de la bulliciosa vida de la ciudad. Sus inquilinos pueden relajarse en una zona chill out sobre el río que fluye.
Katikies se alza sobre un acantilado blanco bordeado por el mar Egeo. Las piscinas se encuentran escondidas en magníficas cuevas que ofrecen un refugio del sol.
¿A quién no le gustaría darse un baño relajante a más de 420 metros, contemplando la ciudad de Nueva York?
Lion Sands es un hotel al aire libre y completamente al descubierto que puede hacer de tu estancia una aventura. Las «habitaciones» están situadas por encima de una reserva de caza, hogar de leones, elefantes y otros animales salvajes.
Situados en la antigua ciudad termal de Saturnia, estos manantiales tienen una constante de 99.5 grados Fahrenheit durante todo el año.
Situada en lo alto de Los Alpes italianos, esta estación de esquí es perfecta para pasar el invierno.
Las luces en estas aguas provienen del fitoplancton que brilla en la oscuridad, por lo que es el lugar perfecto para un paseo nocturno.
Levantarse por la mañana con el sonido del mar no tiene precio, y más en una habitación como esta.
Cada año, estas colinas explotan en un mar de color rosa y blanco cuando comienza la temporada de fructificación.
El paisaje y la fauna de Botswana es inmensa y no hay mejor lugar para disfrutarla que desde una tienda de campaña aislada.
Este túnel se formó durante muchos años, ya que los trenes de la línea pasaban tres veces al día, moldeando los árboles circundantes. Ahora abandonada, las vías del tren son un lugar romántico para una tarde de paseo.
La realeza de Bali una vez residió en las aldeas vecinas. Situado al pié del «Valle de los Reyes», el Viceroy consta de 25 chalés privados con piscina. A este refugio tropical secreto se accede en helicóptero y ofrece algunas de las mejores vistas de la tierra.
Construida por el arquitecto Dymitr Malcew, esta casa flotante puede ser transportada a cualquier océano del mundo y anclada a la superficie. Ya se trate del Mediterráneo o de un pintoresco lago europeo, su dormitorio podría estar en cualquier lugar.
Un lugar paradisíaco que podría teletransportarnos a Narnia como a los protagonistas de la famosa saga. Esta cala se caracteriza por las gigantescas formaciones rocosas que la forman.
Este hotel está construido en un acantilado con vistas a las montañas y al mar Caribe. Dentro del propio dormitorio tenemos una piscina que se funde con las vistas al océano.
Esta magnífica playa fue creada de forma artificial por una prueba de explosión militar en 1900. Las islas de los alrededores fueron catalogadas como parque natural. A esta playa oculta sólo se puede acceder nadando a través de un túnel de quince metros.
Este hotel remoto ofrece espectaculares vistas de la aurora boreal mientras conciliamos el sueño. A kilómetros de distancia de la ciudad más cercana, este hotel ofrece una vista poco común, no contaminada, del cielo nocturno estrellado.
Durante la temporada de lluvias, el desierto de sal se convierte en el espejo más grande del mundo. Por la noche, las estrellas se reflejan en el agua y crean unas vistas increíbles.
Este es el primer dormitorio completamente submarino del mundo. Las aguas de arriba son el hogar de tiburones ballena, mantas rayas, delfines, tortugas y un gran arrecife de coral.
La única manera de entrar en esta habitación de cuento en el castillo de Cenicienta es ganar una competición, por lo que es un lugar muy exclusivo para pasar la noche.
Lugares raros, exóticos y extravagantes donde los haya, para todos los gustos aunque seguramente no para todos los bolsillos.
Fuente: distractify
